Una advertencia de lo que ya está pasando. Fuente. |
Es un temor antiguo, pero
es un temor que nunca nos abandona. El miedo a que la tecnología nos esté
deshumanizando ha hecho que surjan grandes obras de ficción, entre la que
destacaría, por ejemplo, la serie Black
Mirror. Muchos tienden a quitarle valor: ¡es ciencia ficción! Se equivocan.
Es una advertencia. La buena ciencia ficción, la que practicaban grandes como Ray Bradbury, casi siempre lo es. De
ahí que tener redes sociales no nos hace más sociales, es más, incluso nos hace
crueles.
La tecnología que alimenta a ¿seres humanos? Fuente. |
Esta semana os hablaba ya
de cómo el estreno de una película como Batman
v Superman abrió la veda para que muchos insultasen y denigrasen a otras
personas en las redes, tanto si te gustaba como si no. Haters, fanboys… Una "batalla" que chilla mucho y contra algo que no es tan importante. Vivimos en una
sociedad donde dementes desparraman su odio, incluso matando a inocentes, pero
se prefiere perder el tiempo “discutiendo” o ladrando sobre los gustos fílmicos
de la gente. Es decir, solo por una opinión podías convertirte en el blanco de
las iras o en un tirano intentando aplastar a todo el que pensase lo contrario.
Vergonzoso.
Y símbolo de estos
tiempos, en estas semanas, muchos cibernautas buscando el chiste fácil han
aprovechado la fotografía de un actor para reírse de él. Es la sociedad del
meme, puedes pasar una imagen graciosa y esperar que nadie se ofenda y no, no
hablo de ser políticamente correcto, hablo de no querer destruir a la gente que
nos rodea. Estoy refiriéndome al caso de Wentworth
Miller, el actor conocido por protagonizar la serie Prison Break y que interpreta al Capitán Frío del mundo de los cómics de DC en la pequeña pantalla.
Adicción a la tecnología. Fuente. |
En Internet, se aprovechó
para comprar su físico musculoso durante Prison
Break con otra foto en la que había ganado algo más de peso. Los chistes y
las burlas no dejaron de llegar. Cualquier persona con una conexión a Internet
parecía dispuesta a reírse del actor, como, si por ser un personaje popular, ya
pudiera convertirse en el último guiñapo para ser quemado en la plaza del
pueblo. Cada usuario parecía dispuesto a convertirse en el maldito Ricky Gervais (pero sin ninguna gracia)
de Internet a costa de dos fotografías, una promocional y otra sin contexto
donde el actor había cambiado. Al fin y al cabo, ¿no está arraigada esa idea de
que los famosos no tienen sentimientos, de que podemos burlarnos de ellos por
ser personajes públicos, sin ningún signo de decoro? Pocos se pararon a pensar
en que esa persona tenía sentimientos y una historia detrás. Menos pensaron que
realmente esa historia valiera la pena. Y, como siempre, el ser humano volvió a
demostrar que es un animal cruel, quizás el más cruel de todos.
Bromas, chistes, sátiras…
Todo el mundo es valiente detrás de una pantalla de ordenador. Nos hemos
acostumbrado a ello. Nadie se detiene ya a pensar si un comentario puede
dolerle a otra persona. Hemos olvidado el dolor en busca del reinado del chiste
efímero y pérfido. Actuamos sin mala voluntad, pero somos malvados.
Y fue justo entonces
cuando Wentworth Miller respondió desde las redes sociales y contó su historia,
un relato duro que significa mucho para la gente que aún alberga algo de alma.
El actor contó que pocos sabían que, durante la foto de 2010, cuando él dejó
parcialmente la actuación, había sufrido tendencias suicidas y autodestructivas
como fruto de la depresión con la que llevaba lidiando desde muy joven, que le
había costado amigos, relaciones y noches en vela.
¿Aprovechamos las redes sociales e Internet para ser peores? Fuente. |
El actor (también guionista
de la fantástica Stoker) contó su
experiencia en un largo texto donde demostró que, a veces, la gente debería
congelar la risa cruel antes de expulsarla como vómito. La vida de Miller no parece haber sido fácil y,
como muchas personas, ha soportado una
depresión capaz de destruirles, han luchado cada día por no rendirse y ha
intentado convertirse en un ejemplo para todas esas personas que sufren.
La depresión no es un
chiste. Estar mal no es divertido. No podemos reírnos de la gente y
destrozarla. Es como en un patio de colegio, no podemos hacer bullying a alguien; esa violencia debe
dejar de existir si queremos avanzar. Desde que leí ese texto, Miller se ha
ganado aún más mi respeto, por ser tan valiente como para afrontar este “meme”
y querer ayudar a las personas que han pasado por el infierno por el que él ha
pasado.
El actor dando vida al Capitán Frío. Fuente. |
La tecnología y la deshumanización. Fuente. |
¿Por qué ya no
empatizamos? Acaso, ¿no todos tenemos nuestra historia tras nosotros? Todos
hemos pasado por situaciones duras y no nos gustaría que se rieran de ello. Yo
mismo he lidiado con situaciones sobre las que no me gustaría escribir y he
aprendido. No quiero reírme ni dañar más a la gente de mi alrededor, he aprendido.
No tengo que ser un niñato toda mi vida. Tengo una edad y sé lo que siente la
gente a nuestro alrededor, sé que tienen sentimientos, sé que no nos gusta que
se rían de nosotros. De pequeño, recuerdo que mi madre me decía que jamás
hiciera lo que no me gustaría que me hicieran a mí. He intentado seguir ese
lema, aunque alguna vez me haya equivocado.
Otro que me aplico es: ¿estoy
pagando por Internet para usarlo para estas cosas? Pago por Internet para
descubrir información, compartir opiniones razonadas, descubrir cosas, enviar
mis escritos… En definitiva, por algo útil. Y aunque podamos perdernos con
imágenes divertidas, deberían ser siempre inofensivas. No por lo políticamente
correcto, sino por no dañar a otras personas cuyas historias desconocemos.
Por mi parte, he tenido
mis batallas contra esos días tristes en los que parece que todo se derrumba
sobre ti, esos días en los que no quieres hablar con nadie, esos momentos en
que no puedes ni respirar… Y me peleo cada día por encontrar algo por lo que
luchar, por intentar que todo siga adelante y salga bien. Quiero moverme,
porque si me detengo, será peor. He luchado por no estar triste, he batallado
contra mi peso, he afrontado las situaciones más extrañas… Y aquí sigo y sé que
esto es duro. Muy duro. Y sé que las vidas de las otras personas también, incluso más.
¿Nos está deshumanizando la tecnología? Fuente. |
Hoy, que vivimos más
conectados del mundo (que yo desde Tenerife puedo escribir esto que, tal vez,
tú leerás en un sitio muy diferente), siento que la gente tiende a separarse de
los seres humanos, de las emociones humanas. Asumimos que todo lo que aparece
en la pantalla es falso, irreal, que podemos dañar los sentimientos de otra
persona si es que acaso los tiene, porque ¡es ficción! Creemos que es ficción.
Y nos engañamos. Y vivimos en esa mentira tecnológica. Y no nos merecemos eso.
Mentes frías y corazones
apagados, la artificialidad vaticinada por la María de Metrópolis se cierne sobre nosotros y debemos luchar, pero no por
lo que pugnamos ahora. Combatimos por el Me gusta y batallamos por una cita y
una copia. Olvidamos el valor de una sonrisa, de una muestra de afecto, de un
abrazo. Nos helamos bajo la falsedad de los circuitos y dejamos de lado a las
personas que sufren o nos necesitan. Vivimos en el reino de lo efímero. Y todo
se marcha. Y nuestra humanidad también.
Deberíamos recordar que
hay un mundo ahí fuera y gente que nos necesita. Sería un mundo mejor si todos
nos diésemos cuenta de ello. Deberíamos hacerlo antes de que fuera tarde.
María de Metrópolis, una advertencia. Fuente. |
Somos gilipollas, tal cual y siempre.
ResponderEliminarHablando de la adicción a la tecnología, hay un cómic de Image que trata mucho de los temas que tocas en el post: Tokyo Ghost.
Tengo Tokyo Ghost apuntado en la lista desde hace un tiempo, porque me llamaba la temática, pero ya que me lo recomiendas, lo adelanto en la pila de lecturas para ver si puedo leerlo pronto. ¡Muchas gracias, Felipe!
EliminarGracias a ti, Carlos, por este mensaje de cordura (esa gran maltratada) que has lanzado en tu blog
EliminarCreo que no. Los medios no hacen más crueles. Sólo facilitan esa crueldad.
ResponderEliminarPodría mencionar las burlas a Socrates en las obras de Aristofanes, pero es muy lejano. Mejor mencionar el Quijote apocrifo de Avellaneda, cuyo autor se desconoce quien fue. Quienes lo han leído sostienen que no se compara al original. El autor se dedica a burlarse de Cervantes, diciendo que tiene más lengua que mano, refieriendose a que Cervantes tenía una mano inutilizada, por una herida en la batalla de Lepanto (Tema para El ministerio del tiempo). Cervantes se vengó tomando algunos de los episodios de libro para su secuela. Y según se dice, los mejoró. Magistral venganza.
No conocía la dura historia de ese actor. Jamás habría pensado en burlarme de una historia así. Sobre todo con el interesante personaje que hace, alguien que puede ser un villano, pero con principios. Tanto que se comporta como un heroe, en ocasiones.
La depresión puede ser un chiste, incluso un buen chiste si pertenece a alguien con talento. Pero no todos pueden ser Monty Python.
Saludos.
La historia de la ofensa es arga y no quita que grandes artistas, a veces, hayan recurrido a la burla, pero aquí tampoco es que haya una dosis de ingenio o una guerra abierta entre las dos partes, solo hay burlas indiscriminadas.
EliminarDesconocía la historia de este actor, pero jamás me ha hecho gracia burlarme del cambio físico de alguien así. Nunca se sabe por lo que ha pasado.
En cuanto a actor... Siempre recordaré con cariño la primera temporada de Prison Break y su Capitán Frío no está nada mal. En Legends me asombraba a veces que fuera más héroe que muchos héroes.
Gracias por el comentario.
La gente se perdió el mensaje de Tambor en "Bambi": " si al hablar no has de agradar, será mejor callar"
ResponderEliminarEl tema es que justamente ayer leí un artículo de una pareja que había publicado unas fotos y alguien había compartido una en la que estaban de broma (xq ella recogió el ramo en una boda y él ponía cara de "estoy acabado") total que él era gordito (y en mi opinión muy guapo) y ella la típica sureña delgadita y rubia. Pues la gente se metió a decir que si el tío parecía retrasado, que si era gordo y que qué demonios hacía ella con él. Yo me pregunto. ..cuán miserable puede ser la gente para ofender de esa manera tan gratuita e innecesaria? ? Y sobre el tema redes...hubieran hecho lo mismo en el cara a cara?? Yo creo que no
Lo que expones es otro ejemplo más de cómo las redes sociales han banalizado las relaciones entre las personas. Yo no soy de esas personas que va por la calle y se ríe de otra persona; en cambio, noto que esa actitud se repite mucho en las redes sociales, que son el equivalente a un patio de vecinos cotillas donde solo se vive destripando a los demás.
EliminarSin duda, el ejemplo que pones es una justificación más. Creo que la gente no entiende que al otro lado de la pantalla hay una persona, que no es un juego y que la gente tiene sentimientos.
Y no sólo eso...creo que también muestra lo libre que se siente la gente para opinar de todo. Es decir, si se hace una pregunta, si es un foro para hacer comentarios sobre algún tema y compartir ideas, pues perfecto...pero meterse a comentar una foto de alguien que no conoces ni es famoso, sólo por ofender....dice muy poco de esa gente. Y si es famoso...no entiendo realmente la necesidad de hacer comentarios negativos
EliminarSí, estoy absolutamente de acuerdo. Como se suele decir, creo que es importante recordar que el derecho a la libertad acaba donde comienza el de otra persona y que, a veces, las opiniones son libres, pero causan daño y más si no vienen a cuento (como es en la mayoría de los casos).
Eliminar¡Hola! Hasta hace poco hice un tema parecido de esta gente que parece que no tuviera otra razón de vivir que atacar al otro.
ResponderEliminarPersonalmente, estoy en contra de todo eso porque si estás pasando por un mal momento y ver que tantos extraños y desocupados te tienen de punto es algo que te puede hacer caer. Es como que te acosen en la escuela. Muchos lo soportan hasta que el vaso rebalsan.
No creo que Intenet tenga la culpa de esto, sino, que como toda tecnología ha facilitado al bastardo ser bastardo un promedio de veintucuatro horas, siete días a la semana. El idiota es idiota desde siempre y si tiene internet, queda registro de esto.
Pero sí, comparto algo de Casona cuando uno de sus personajes decía el diario 'uno lee que 30.000 murieron y puede seguir tomando el café como si nada. Y no es que tengamos muerto el corazón, lo que tenemos muerta es la imaginación'. Coincido totalmente con él. Te apuesto que de ver los resultados de cerca, ver como alguien puede llegar a caer en la depresión, el suicidio o el automutilamiento es algo que los afectaría, pero como bien dice Casona, son personas que no piensan que detrás de todo eso hay personas. No imaginan una consecuencia porque quizás para ellos es tan sólo un número, una foto, un nombre y ahí, se acabó. Es una maravilla esto del internet pero creo que también es algo que puede ser tan simple como vacio si se lo ve desde este punto.
Considero que tampoco es tan drástico burlarse si uno se lo toma a bien a esto. A mí no me importa esto. Con mis amigos, a veces, hacemos retrospectivas y nos burlamos de nosotros mismos. Y es que, llegar a eso es también una prueba de que lo has superado o no te importa ya más con en esos momentos. Sé de actores a los que no les importa esto y hasta les gusta todo, el tema está como siempre, en ese pequeño grupo que se siente mal por ello.
Además, hoy en día, como artista, sabes que te atienes a algo similar. Si sabes que eres débil, lo ignoras. Aunque, yo creo que esto de andar en boca de todo tiene su lado bueno desde el punto artístico.
En Argentina, muchos artistas viven del puterío y que se hable mal de ellos, porque eso los lleva a dar entrevistas para aclarar todo, para pelearse con alguien al aire, hacerse la victima en otro programa y cuando te das cuenta, ya tienen el estelar del próximo musical del verano. Vende. Estar en los medios bien o mal, vende. Te podría decir de muchas veces que por un meme e ido a noticias reales y me he enterado de cosas que no sabía. Tiene su punto bueno. Sin ir más lejos, si no es por el foro donde estoy y los memes de Di caprio, ni me enteraba que ganaba un Oscar y que encima, dio un discurso ambientalista. Tiene su lado bueno esto de todo lo malo.
Arjona, una vez dijo que a él le guste que lo amen o lo odien, pero nunca que lo ignoren. Más allá de que sea para una crítica buena o mala, causará ambos efectos, habrá gente a la que se sumara y puede buscar información o materiales tuyos, habrá gente que se sumara al odio colectivo. Y como una tercera opción, habrá gente a la que se dejara indiferente.
¡Buen tema! Me extendí demasiado jaja
¡Cuidate!
Bye!
Hola, Roxana
EliminarVeo que este tema cada vez es algo más, tristemente, habitual en las redes, pero al menos, sirve para que hagamos post donde expresar nuestra opinión y ayudar a la gente que se lo merece.
Tu comparación con el acoso escolar es muy acertada. Me temo que la mayoría no es consciente de que habría que tener más cuidado con los sentimientos de otras personas. No somos adivinos, no podemos saber por lo que está pasando.
De todos modos, sí, el Internet sirve para cosas buenas y es un medio, pero el imbécil siempre lo será, ya sea con Internet o con una nota que pasarle a otro en la escuela o un comentario soez cuando van caminando por la calle.
Me parece muy acertada la reflexión de Casona que compartes. Es el mismo motivo por el que la gente cada vez pierde más el valor hacia las imágenes de atentados en la televisión. En la mayoría de las ocasiones, solo ven muertos, no ven la historia y el drama que hay detrás y la deshumanización es constante. La empatía parece una habilidad, casi un don en estos tiempos que estamos viviendo actualmente.
Considero que sí, que todos nos reímos entre amigos sobre nuestras chorradas, nuestras malas fotos, lo que hemos sido… El problema viene, creo, cuando son desconocidos. Ahí no existe confianza. Podemos ser fuertes y que nos dé igual lo que piensen los demás, pero, a veces, simplemente, hay gente que no está bien y un comentario así no hará que esté mejor.
Creo que era Oscar Wilde el que decía lo de no importa que hablen bien o mal de mí, mientras que hablen. La popularidad puede ser importante en estos días, pero también te pone una diana en la cabeza. No obstante, ese tema de “que hablen mal” se lleva también en España, aunque ignoro ese tipo de programas y polémicas porque los considero basura. La gente ha perdido el alma mientras disfruta de programas de vísceras donde insultar y maltratar a los demás a cambio de dinero o un minuto de fama. Eso no me interesa, a mí me gusta disfrutar de otras cosas: una charla, un paseo, un libro… Pero entiendo lo que quieres decir.
Muchas gracias por tu comentario, ha sido extenso sí, pero bastante interesante y me encanta poder leer comentarios así en el blog.
¡Un saludo enorme!
Black Mirror es una serie que me encanta, a pesar de sus momentos duros (esos en los que te das cuenta de que no estamos tan lejos de todo eso).
ResponderEliminarLa gente acostumbra a tomarse poco en serio la Ciencia Ficción, no saben que algunas de las advertencias que sustentaron un día sus páginas son ahora una realidad...
Miller ha sido muy valiente al compartir su experiencia. Prison Break me gustó mucho en su día, es más, mis padres también estaban completamente enganchados. La relación de estos dos hermanos y los secundarios conseguían mantenernos pegados a la pantalla capítulo tras capítulo. Stoker la tengo en mi lista de series pendientes, fíjate que ni siquiera sabía que él era el guionista, simplemente leí la sinopsis y me pareció que tenía buena pinta.
Lo que ha hecho el público es lamentable, se escudan en el anonimato de las redes sociales, ven a la gente famosa como productos, se olvidan de que son personas, incluso en el caso de que se trate de ídolos. Aquí en occidente convertimos todo lo que tocamos en productos... sea para adorarlos o "ajusticiarlos" son muchos los que olvidan que estas personas sienten y padecen como tú y como yo.
Metrópolis, una de mis películas favoritas. La música, la atmósfera y la contundencia de sus imágenes... preñada de metáforas hasta límites que todavía hoy me asombran :)
Sí, sin duda, Black Mirror me parece una de las series más importantes de los últimos tiempos. No solo como obra dramático, sino por su guion y la advertencia que nos hace sobre aquello que ya estamos viviendo.
EliminarLa mayoría de la gente piensa que la ciencia ficción son solo tipos con pistolas láser... No, debajo suele haber algo más. Solo hay que encontrarlo. Y, a veces, ya lo estamos viviendo.
En cuanto a Prison Break, ¡a mí me enganchó la primera temporada! Es más, fue una de mis series favoritas y creo que hay que reconocer el valor que tuvo esa producción en su momento. Me gustó mucho.
Sobre Stoker... ¡Te encantará! Ya verás. Te la recomiendo. Cuando tengas un momento, ve la película. Creo que será una de tus favoritas. Ya me contarás. Oscura y tenebrosa y con una banda sonora genial, además de una dirección espectacular, con una fotografía genuina.
Con respecto a lo que ha hecho el público, estoy tristemente de acuerdo. Creo que este tema es bastante serio para que nos riamos de él y espero que la gente haya aprendido de esta situación.
En cuanto a Metrópolis... ¡También es una de mis favoritas! El expresionismo alemán es fascinante, Lang es deudor de ese movimiento que dio películas geniales como El gabinete del doctor Caligari así que aquí tienes a otro colgado de Metrópolis, jejeje.
¡Muchísimas gracias por tu comentario! Un placer como siempre poder hablar contigo.
¡Hola!:
ResponderEliminar¿Dónde está el botón de los aplausos en blogger? Porque con esta entrada los tienes más que merecidos.
Internet se ha convertido en el patio de colegio donde los abusones tienen todavía más impunidad al poder ejercer esa violencia nacida de su propio complejo de inferioridad. El anonimato les da poder para destrozar y hacer chiste fácil de cualquier persona (sea o no famosa).
Me encantó la serie de Black Mirror aunque me dejó muy mala sensación. Es una ficción tan cercana a la realidad y tan brutal que te hace plantearte que estamos haciendo con nosotros mismos. Nos dan una herramienta tan útil como internet y la utilizamos para el cotilleo, la burla, la mofa pública.
Hace poco vi un video de una chica que ahora tendrá unos veintitantos y que se alegraba de haber crecido en la época en la que lo hizo ya que de haber crecido en esta era tan tecnólogica, cada uno de los abusos escolares que sufrió habría sido documentado y expuesto a todavía más personas.
¿Las redes sociales nos hacen más crueles? Por desgracia yo creo que lo que ocurre es que saca a relucir lo que realmente somos. No digo que la forma de organizar la sociedad y el abuso de la tecnología no nos haya separado y deshumanizado. Hemos perdido la empatía y el sentido común pero en mi opinión esto es así, porque el ser humano tiene esa parte oscura que necesita sentirse por encima del otro para olvidar sus propias carencias.
De ahí que disfrutemos metiéndonos con un famoso que engorda o una actriz que sale a la calle sin maquillaje.
En fin, que me he levantado hoy de un optimista que no veas jajaja.
Muy buena reflexión la que has hecho en esta entrada, creo que todos deberíamos pensar un poco más en esto antes de reírnos de nadie.
Estoy un poco atradada con tu blog, voy a ver si me pongo al día.
Saludos y que tengas un buen comienzo de semana ;)
¡Hola, Chari!
EliminarMe entusiasma que haya alguien buscando ese botón de aplausos para El Antro, jeje.
Muchas gracias, me alegro de que te haya gustado esta entrada. Considero que fui bastante sincero a la hora de escribirla y es que estos temas siempre son cruciales.
Estoy de acuerdo en lo que comentas sobre este patio de abusones. De pronto, la gente cree que insultar o vejar a otra persona no tiene consecuencias. Y las tiene. Las personas somos reales, sufrimos, padecemos.
En cuanto a Black Mirror, sí, tiene esa capacidad para conmover, pero también para hablar sobre nosotros mismos. A menudo, como suelo decir, la ciencia ficción es una advertencia sobre nuestro presente. A través de ella, obtenemos una llamada de atención de lo que ya está pasando. A menudo, no es raro que veamos alguna noticia que nos recuerda a un capítulo de Black Mirror.
Tristemente, sobre lo que comentas de la chica, tiene razón en que Internet hace aún más público el maltrato que sufren algunas personas. Pienso que si bien Internet tiene muchos puntos buenos y, a menudo, hablo sobre ellos, en realidad, también hay muchos malos, como demostrar cómo es mucha gente en realidad. Hay buenas personas, pero también hay mucha bestia deseosa de dañar a los demás.
Como siempre, muchísimas gracias por tus comentarios y por seguir leyendo el blog (no te preocupes, que no se va a ninguna parte y las entradas siempre están ahí para descubrirlas, jeje… Maldíceme por estar de pesado colgando cosas todo el día).
¡Saludos y feliz semana!