RETO DEL JUNTALETRAS: Cinco trucos para escribir más

¡Hora de escribir! Fuente.
Hace poco, una compañera escritora me hablaba de cómo tenía que compaginar sus labores y sus ganas de escribir y cómo le resultaba muy complicado. Ese tema no me es ajeno y no quería dejarlo pasar para abordarlo dentro de este Reto del Juntaletras, porque todos pasamos por esto, es inevitable: como las ganas de no querer despertarse un lunes, que todos moriremos y que siempre harán un cover horrible de tu canción favorita.

Trabajo para mantenerte, deberes con los que cumplir, procrastinación (esa palabra fina para dejar todo siempre para el futuro)… Muchas cosas se "interponen" en tu camino como escritor o escritora. En un mundo idílico (con muchos dragones y esas cosas que me gustan), el juntaletras podría sentarse delante de su libreta, su ordenador o su libro con páginas hechas en piel humana y escribir todo lo que quisiera, pero este no es un mundo idílico y a saber si ese “relax” no sería contraproducente. “Un escritor es la suma de sus vivencias”, que decían en la película The Writers, y es importante que vivamos, pero si amamos la escritura, también que escribamos. Entonces, ¿cómo podemos organizarnos para seguir respirando y, a la vez, escribiendo si es que ambas no son sinónimos (vale, esta metáfora es una de mis bohemiadas)? Os voy a dar cinco trucos para escribir más, ¿qué los hace diferentes a otros consejos? Que a mí, rey del "me distraigo", me han funcionado:

Organización


Y tú dirás: "vaya, evidente, ¿no?". Y yo te diré: "No siempre, querido Watson" (espero que te llames Watson). Os cuento: todas las personas tenemos cosas que hacer (¿a qué nunca lo habías pensado?) A veces, nos estresamos y nos desbordamos. No sabemos qué diantres estamos haciendo ni cómo hacerlo. Me pasa mucho. 

¿Mi consejo? Conviértelo en un juego: utiliza post it, notas, agenda, aplicaciones, la recordadora de la abuela de Neville o lo que sea para apuntar lo que tienes que hacer, luego organizarlo (primero, segundo...) y ve cumpliéndolo como si fuera una partida de un videojuego. Suena estúpido, pero agradezco mucho hacer un check e ir cumpliendo con las cosas incluso antes de plazo. 

¿De dónde viene esto? Por “culpa” de mi forma de estudiar de los últimos años de instituto y toda la universidad, siempre tendía a hacer los apuntes y estudiar día a día y así me libraba de los estudios de golpe (odio los exámenes). A veces, las acciones que antes se asumen (o las que se sabe cuándo hacer), nos permiten superar esos baches, valorar el tiempo y saber cómo enfocar a la hora de escribir.

Si pasamos al enfoque de organizar, tenéis diversos sistemas (os he hablado ya de los escritores mapas y brújula) y también os he mencionado la importancia de la documentación y la elaboración de las sinopsis, escaletas, guías visuales… Antes de escribir. Una pequeña guía siempre es buena para saber por dónde andamos a la hora de teclear.


¡Maldita sea, capitalismo o lo que sea, que nos obligas a organizarnos! Fuente.

Escribir siempre, aunque sea poco


Eso pienso. Y si no te vale que lo piense yo (oye, estás en tu derecho), te diré que también lo dicen grandes escritores como Stephen King o Ray Bradbury (y a ellos, en serio, hay que escucharlos). El escritor de Misery es partidario de que leamos y escribamos varias horas al día; Ray Bradbury era partidario de que escribiésemos un cuento cada semana. ¡Fantástico! Es un reto perfecto. Como señalaba el escritor de Crónicas Marcianas, escribir es un músculo y se va mejorando a medida que se ejercita. Expresarse, imaginar y crear es más fácil cuanto más lo haces, como todo en la vida (salvo las ecuaciones, ¡odio las matemáticas! ¡Bien!).

Por eso (y porque mis relaciones sociales son nulas), escribo todos los días. Ya sea una entrada para el blog, ya sea una crítica para Making Of, ya sea una entrevista, ya sea un relato, ya sea una novela… Como veis, intento cambiar para probar cosas entre sí, ir mejorando y no aburrirme (que es importante). Lo importante es comunicarse, contar historias, probar, ser creativo... Esto no va de intentar comer helados de diferentes sabores en vez de siempre el mismo, va de probar algo más que helados: primeros platos, segundos platos, canciones, libros... ¿No os está dando hambre?

Algunos días, con mucho tiempo, puedo escribir de golpe diez páginas o más. Soy un enganchado. Me encanta y escribo mañana, tarde y noche (siempre que puedo), porque ahora me lo permite mi situación (estudiante buscándose la vida y enviando manuscritos a editoriales, oh...).

Mientras trabajaba o estudiaba (yendo a clase todos los días y demás), solía aprovechar las tardes y noches, aunque fueran cien palabras que poner en la escaleta de lo que acabaría haciendo. Recuerdo que uno de mis extraños venazos, en el primer y segundo año de carrera me dedicaba a escribir todos los días un relato y un microrrelato. Así, durante semanas. Al final, aprendí bastante, de los buenos, de los malos y más.

Diréis: "¿cien palabras diarias? Vaya miseria". Yo he conocido a gente que no dice tantas en alto en un día. Pensad en lo que servirá esa cifra si escribís cien palabras todos los días. Setecientas en una semana. Seguid así (yo y los cálculos como que no). En un mes, tendréis un par de páginas. Si hacéis más de cien, puede que tengáis capítulos. Y si escribís mil, pues acabaréis teniendo una novela antes de fin de año. Lo importante es no distraerse y seguir escribiendo. Los malos momentos pasan y los tiempos estresantes también. Siempre se puede encontrar un motivo y un segundo para escribir, aunque sea en una libreta (o en un libro forrado de piel humana, coff, coff...).


Escribir, aunque sea poco. Hacedme caso. Fuente.

Adiós, Internet


Y con Internet, quiero decir distracciones de cualquier tipo. Adiós, vídeos de gatos simpáticos. Adiós, discusiones en foros. Adiós, responder al escritor endiosado de turno. Adiós a seguirle el juego a esos que hablan de escribir y nunca escriben. Adiós a vuestro móvil. Adiós a vuestro hijo recién nacido que... Vale, esto no. Pero ¿me pilláis?

Siéntate delante de tu libreta, tu ordenador o lo que sea y escribe. Olvida el mundo. Céntrate en lo que estás haciendo. Alan Moore decía que el que desea ser escritor debía tratar a la escritura como su dios. Yo lo creo, ese es uno de los motivos por los que admiro al escritor de From Hell. Debes venerar a la escritura. No basta con juntar letras para ser famoso o para buscar distinción (si lo haces por eso, te frustrarás) y no basta algo peor: rezar a tu dios o querer rezarle, mientras ves gif chorras o mierdas varias en las redes sociales.

Piensa en todos los grandes libros que has leído, en todos los grandes escritores… En serio, ¿te gustaría pensar que Shakespeare no hubiera escrito Romeo y Julieta porque hubiera preferido poner estados ñoños en Twitter? ¿Te gustaría un mundo donde Lovecraft se dedicaba a hacer el troll en foros? ¿Te gustaría que Tolkien hubiese seguido corrigiendo exámenes en vez de escribir el inicio de El Hobbit en aquella página en blanco que le dejó un alumno en uno de esos test? ¿A qué no? A mí no. 

Todos moriremos algún día. Debemos enfrentarnos a ese límite finito de tiempo haciendo algo más que dando Me gusta o similar. Al final, solo el arte conseguirá que vivamos un poco más.


Si haces esto, que sea escribiendo y no en Internet. Fuente.

Saber decir no y sí


Es muy importante y muy complicado. Os explico: a menudo, he dicho sí a cosas en mi vida que me han quitado tiempo y me arrepiento de ello. Soy un chico fácil, ¿qué le vamos a hacer? Deseo siempre pensar que he aprendido de esas experiencias , pero… Por ejemplo: una vez intenté (bien remarcadito) ayudar a organizar un evento relacionado con cómics en mi isla natal; terminé lamentando que toda la organización se compusiera por gente que no compartía ninguna de mis ideas y perdí mucho tiempo que podría haber dedicado a escribir o a cualquier cosa que no fuera dar mi trabajo, gratis, a tipos que se aprovecharían de él para luego destripar. ¿Qué saqué de eso? Aprendí a no participar en cosas así, a decir no, pero incluso así, no dejó de matarme tiempo de aprendizaje, lectura y escritura.

También me ocurrió con un curso de intensivo de inglés el verano pasado. Fui a dos clases y el profesor prefería poner las respuestas en un proyector, leer mensajes en su móvil o tener el mismo ímpetu que alguien que va a los sitios solo por estar. Yo tenía que tener una novela corregida para esa semana. No debía perder el tiempo. No debía alejarme de mi objetivo. Dejé el curso y volví a matricularme en septiembre con otra profesora. Terminé mi novela, ahora tengo el título de inglés ¿y qué queréis que os diga? Es otra historia que contaros.

Si queréis que os sea sinceros, aplicaría lo que decía Neil Gaiman. Coged vuestra meta (“ser escritores”) y situadla en lo alto de una montaña al final de un camino. Bien. Valorad todas las ofertas y acciones como piso de ese camino. Si te ofrecen publicar un relato, eso te acerca a tu meta. Si te proponen dedicarte a hacer notas de prensa que te modificarán y llenarán de erratas porque ellos consideran que son más sabios que tú, aléjate porque eso te quita del camino hacia tu meta. Y créeme, tú quieres llegar a ese camino. Intenta que ese sendero esté bien. Puedes fallar, puedes caerte, pero intenta siempre aprender y nunca desfallecer. A veces, estarás en el pico, otras no, pero debes disfrutar y luchar por lo que desees, porque solo tenemos esta vida y sería muy triste vivir la vida de otro.

Y eso me hace pensar en dos cosas importante:

  1. Si escribes, hazlo porque te gusta. Olvídate de la fama y todas esas banalidades, porque te frustrarás. Lo comentaba recientemente el compañero y estudioso del cómic y la cultura Daniel Gavilán en las redes sociales: es importante que escribamos porque nos guste, porque si no, nos frustraremos cuando no se reconozca nuestro trabajo. Reenfocar ese punto de mira me pareció muy acertado.
  2. Como decía la rockera Amanda Palmer, no eres escritor por publicar o autopublicar ni por ir a una escuela de arte o no… Eres escritor si conmueves a alguien con lo que has escrito. Y esa es la gran meta, el gran fin, la gran victoria.
Y no siempre es una cuestión de perspectivas. Fuente.

Termina la carrera


La constancia es para mí más importante que la imaginación. No diré que no sea necesario imaginar, porque me estaría mintiendo, pero sí diré que, si bien puedes tener una imaginación admirable, si no la conviertes en algo, solo serás alguien con muchos sueños (cosa que tampoco está mal). El arte es una forma de plasmar nuestra imaginación, ya sea literariamente o mediante cine, danza, música, pintura…

Lo importante es comenzar el camino. ¿Tienes la historia? Ponla en el papel. En ocasiones, es muy fácil; en otras, muy difícil. Todos los que nos dedicamos a esto, lo sabemos. Hemos probado la miel y la hiel. Hemos disfrutado como locos creando un capítulo y hemos odiado la página en blanco. Hemos abordado historias llenas de ilusión y las hemos terminado abandonando, desesperados.

¿Mi consejo? Acaba esa historia, sí o sí. Yo mismo me he bloqueado muchas veces, pero es cuestión de seguir, incluso cuando te cueste. Puede que te salgan cien palabras malas, pero te volverás a enamorar de la historia tarde o temprano, tras superar el bloqueo (debo hablaros de algunas técnicas que tengo para superarlo), y acabarás terminando tu historia.

¿Cuál es el secreto? Constancia, ya lo he dicho. Como decía un escritor, si esperas a la musa o la inspiración, escribirás poco o nunca. Y como decía otro artista, la musa siempre nos pilla trabajando. Curioso, ¿eh? Pensadlo.

Termina la maldita carrera. Fuente.
Y hasta aquí mis consejos. Siguiendo mi plan, ahora me toca compartir esta entrada por diestro y siniestro, ir a por la ropa que acaba de lavarse e intentar escribir más de M is for Magic, mientras aquí fuera cae el diluvio universal. La vida es así y escribir es duro, pero también es un placer.

Fuente.

Estos son algunos consejos para mejorar la productividad a la hora de escribir. Son los que yo puedo dar desde mi perspectiva: ¿qué os parecen? ¿Cuáles os funcionan? ¿Cuáles no? ¿Hay alguno que os falte? Como siempre, será un placer leeros en los comentarios. En serio, creedme. Me gusta leeros.

4 comentarios:

  1. He leído muchas entradas de este tipo, pero la verdad es que tú has dado en mis cinco puntos débiles.

    Soy la persona más desorganizada del mundo mundial y necesitario cientos de recordadoras como la de la abuela de Neville (aunque yo tampoco recordaría para que son, quizás sería mejor que mi recordadora me gritara como la madre de Ron).
    En su defecto, tengo la pantalla del pc llena de post-it. También he utilizado el método de los check, pero sigo siendo algo desastre, así ya te puedes imaginar los problemas que tengo cuando escribo... Aunque he mejorado un poco en los últimos años.

    He tenido épocas de no escribir nada y otras de no parar. Eso me ha hecho ver que es muy cierto que a escribir se aprende sobretodo, escribiendo. Cuánto más escribes, conoces mejor tus fallos y ves de donde provienen tus bloqueos. Además, las palabras salen con más facilidad y cada vez escribes más en menos tiempos. Creo que no perder el hábito de escribir es una de las cosas más importantes para mejorar.

    Internet, por supuesto que fuera. Y no sólo por la distracción que supone, sino para que no te molesten.
    Hay gente que se enfada cuando no le contesta un mensaje, otros que quieren que estés a su disposición las 24 horas del días y otras personas que, simplemente, piensan que "eso de escribir" no es importante y que pueden interrumpir siempre que quieran. Mejor alejarnos de esa gente. Mejor desconectar internet.

    También me cuesta decir "no" y esto va algo ligado con el punto anterior. He pasado muchas horas en sitios que no quería estar porque me sabía mal, he perdido tiempo contestando mensajes y ayudando a hacer cosas que me apartaban muy mucho de "mi montaña". Cambiar de vida, de actitudes y de hábitos, puede provocar el descontento de muchas personas de nuestro alrededor. Yo he tenido que tomar alguna que otra decisión algo difícil, pero no me arrepiento.

    ¡Ay, el síndrome del proyecto inacabado! Qué bonito es cuando empiezas a escribir una historia con ganas y la euforia te invade. Sin embargo, tarde o temprano el camino se vuelve tortuoso y es muy fácil ceder a la tentación de abandonar para comenzar otra historia y así sentir de nuevo el "subidón". Este año me he propuesto acabar TODO lo que empiece y de momento, más bien o más mal, lo estoy haciendo. Ojalá hubiera entendido antes la importancia de terminar "la carrera".

    En fin, como siempre, mis reflexiones son kilométricas, pero como no hablo de estos temas con nadie más, cuando me dan cuerda no puedo parar.

    ¡Saludos y buen finde!

    PD: El prólogo de Hollow Hallows me ha recordado tanto a Marina de Carlos Ruiz Zafón... Ay.
    Las descripciones del pueblo me recuerdan a Stephen King y eso también me está gustando mucho, ya que, en mi opinión, es uno de los puntos de este autor.

    "Nubes negras fornicaban y empapaban la tierra con su sudor" esa frase me ha hecho detenerme y volver a leerla. Nunca se me hubiera ocurrido una metáfora así.

    Lo estoy leyendo despacito porque ahora mismo tengo muchas cosas entre manos pero Garric Odell me tiene muy intrigada.

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    1. Estos suelen ser los cinco puntos débiles de todos los que nos ponemos a escribir, así que no lo temas. Lo importante es ir mejorando con cada uno :)

      En cuanto a las listas, si te paso una foto de como estoy al lado del ordenador (en cuanto a montañas de post it), te sentirás más optimista. Tengo docenas sueltos por aquí. Y sí, deberían gritarme para acordarme bien de cuándo y cómo los escribí. A ver si la madre de Ron me manda el hechizo.

      Estoy muy de acuerdo en lo que dices de la constancia, tú misma lo has afirmado así que si alguien lee esto y pasa de mí, que te hagan caso a ti (jeje), que has dicho lo que yo quería decir. Es importante escribir todos los días, como bien has señalado, e intentar que no existan muchas etapas de parones, que, a veces, por a o por b los hay.

      Me has recordado a Bradbury con el tema de alejar a la gente que nos molesta o no se toma en serio lo que hacemos cuando escribimos. Bien dicho, hay que escribir y dejar de lado todo este tipo de distracciones e inconvenientes, siempre que se pueda, por duro que sea.

      Crecer es tomar decisiones difíciles, así que te entiendo. A veces, es más importante parar y decir basta que continuar y seguir con un juego que nos acabará dejando de lado. Eso no nos ayuda. Eso no es bueno.

      Y sobre los subidones y las bajonas, yo suelo ser de subidón nocturno mientras escribo y bajona cuando vuelvo a escribir por la mañana. Lo importante es seguir en ea montaña rusa, como quien dice. Así que mucho ánimo concluyendo tus historias y siguiendo la carrera :)

      Agradezco muchísimo, pero muchísimo, tus comentarios porque aquí nadie me comenta y parece que es que cobro (:P) y esto lo hago también para hablar con más gente y descubrir lo que piensan (aparte de pasarlo bien). Así que sigue comentando cuando quieras y con el kilometraje que quieras.

      Sobre Hollow Hallows, ¡muchas gracias! Me alegro de que te haya recordado a Ruiz Zafón. Es uno de mis escritores favoritos, así que siempre recordar a alguien como él es para mí un halago.

      Y lo que me dices de Stephen King... ¡Muchísimas gracias! Me alegro. Me cuesta hacer vivir ciertos lugares, pero estuve mucho tiempo en Hollow Hallows y quería plasmarlo en el papel como se merecía.

      En cuanto a esa frase, creo que la añadí en las reescrituras porque me recuerda más al estilo que estoy usando ahora (aunque a saber). Esa una frase bastante oscura. Creo que plasma bien el ambiente. Una de las cosas que más aprecio de gente como Pratchett o Gaiman es su capacidad para describir los lugares, objetos o acciones de forma creativa. No se conforman con una expresión ya usada o una muletilla.

      Disfruta mucho de Hollow Hallows. Espero que te guste mucho. Garric Odell guarda un par de misterios que creo que te sorprenderán. Es lo que tiene un juntaletras como él.

      ¡Muchísimas gracias por tu amable comentario y por compartir todos tus pensamientos! ¡Siempre son bienvenidos en el Antro!

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    2. Normalmente cada vez que compartes una entrada en facebook, suelo entrar a leerla. Como muchas veces me encuentro con el "No hay comentarios",a veces me da algo de reparo ser siempre la primera persona en comentarte, primero porque soy una pesada y segundo porque cuando hablo de un tema que me gusta me puedo extender hasta el infinito y más allá. Pero después de leer esto, no me cortaré a la hora de comentar.

      Es curioso cuando miro hacia atrás y me veo a mí misma leyendo decenas de artículos sobre cosas como la construcción de personajes, la estructura de la novela, la planificación de la historia, etcétera, etcétera, con una libreta en la mano haciendo miles de esquemas y tratando de memorizarlo todo.

      Que sí,que está muy bien aprender la teoría ¡pero es que no escribía nada! Y cuando digo nada, es nada.
      Pensaba que yo no podía aprender a escribir escribiendo como dice Stephen King, porque, claro yo no sabía escribir. Creía que eso sólo lo podían decir las personas que ya eran escritores (lo que abre otro debate: ¿cuándo podemos empezar a considerarnos escritores?)

      Con el tiempo me he dado cuenta de que para poder aplicar la teoría tienes que conocer tus puntos fuertes y tus puntos débiles. Que para escribir bien tienes que escribir muchísimas veces mal y que nunca, nunca se deja de aprender.

      Escribir es mucho más difícil de lo que parece: tenemos que enfrentarnos a nuestras propias inseguridades, a nuestras montañas rusas emocionales y además, en algunas ocasiones, lidiar con esas personas que pretenden sembrar en nuestra cabeza la semilla de la duda. Esa de ¿para qué sirve lo que estoy haciendo?¿Realmente valgo para esto?

      Me lo he planteado muchas veces y he llegado a la conclusión de que lo que hago sirve para ser yo. Es probable que nunca gane dinero escribiendo, pero sé que en esas horas que se me pasan volando tecleando una historia, soy más yo que nunca. (Qué ñoñadas suelta a veces un juntaletras comprometido con su causa, ¿verdad?). No sé si valgo, pero me siento tan bien cuando estoy metida en esto, que sé que merece la pena.

      Y este sería el bonus track de los consejos para escribir más: La confianza en uno mismo. (No confundir con:¡Oh! Soy un escritor sublime y todo lo que escribo es un regalo de dioses, no sé como ninguna editorial se ha dado cuenta ya.)

      También añadiría leer mucho. De todo, incluso lo peor. Pero sobretodo a los grandes.
      Por mi parte,me he enamorado de la forma de escribir de Pratchet después de leer "Buenos Presagios" (y voy hablándole de ese libro a todo el mundo que no lo conoce. Soy como una adolescente entusiasmada xD)y ya tengo en mi poder "¡Guardias!¡Guardias!".

      Como siempre, un placer leerte y poder compartir mis laaaargas reflexiones aquí.



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    3. Pues ¡muchas gracias por leer las entradas! Me gusta leer los comentarios, ya sean largos o cortos, así que no hay que "disculparse" por ellos. Los agradezco mucho. Sé libre de comentar cuando quieras, sin obligaciones. :)

      Es muy interesante lo que dices. Yo he sido más autodidacta en algunas cosas. He leído algunos manuales y algunos libros sobre escribir, también entradas sobre consejos y demás, pero siempre he intentado tener un sistema fijo, que va mejorando con los consejos y demás, pero nunca he querido aprender demasiada teoría. Odio los exámanes, yo soy más de cosas prácticas, pero entiendo lo que dices y tú misma has entendido lo importante que es poner todo esto en práctica.

      Sobre escribir mal para aprender, es necesario. Bradbury decía que escribiendo un relato cada semana al final tendríamos cincuenta y dos cuando concluyese el año. Y puede que muchos fueran malos, pero otros serían estupendos. Yo digo que es como cocinar, a veces el plato te sale horrible, pero la siguiente vez te puede salir mejor. Siempre se aprende.

      La experiencia de ser feliz escribiendo es valiosísima. La más importante. Como decía Gavilán, debemos escribir por esa sensación, por estar felices con nosotros mismos. Y ya si esas historias conmueven a alguien, el ciclo está completo. Si escribimos para ser ricos, famosos y demás, con las pocas posibilidades que hay... Es muy, muy duro y muy, muy, muy frustrante. Y eso no ayuda.

      Me gusta mucho ese bonus track y lo considero crucial. No, ser un arrogante no ayuda (conozco a varios autores que son buenos, pero por su arrogancia y su modo de escribir cada vez más descuidado, me espantan). Es importante escribir sabiendo que somos capaces de ello, eso sí, sin duda.

      Sí, es muy importante leer de todo, bueno y malo, como bien dices y de los mejores. Añadiría leer de todo. Hay muchos autores que solo leen libros y creo que es interesante leer más cosas aparte de novelas de ficción. Por ejemplo, teatro, poesía, cómics, libros de historia... A mí me encanta cambiar de estilo y aprender cosillas, así que es bastante interesante.

      Me alegro de que te haya gustado el estilo Pratchett. Es muy particular. Devoré varias de sus novelas hace unos años y aprendí un montón de ellas (me influenciaron también). Mi pareja me regaló Ronda de noche en mi último cumpleaños, así que pronto volveré a zambullirme en sus palabras. Ya me contarás qué te parece ¡Guardias!, es una de mis novelas preferidas. Seguiré pendiente de las reseñas de tu blog :)

      Como siempre, muchísimas gracias por tus palabras y por tus reflexiones. Son geniales poder leerlas. Un saludo enorme.

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