Día 5: “Suicidas, cines, chicos de tinta y el cameo del director /
guionista”
Mi idea era
grabar por fuera de un cementerio y de un cine real. No teníamos permisos.
Podíamos acabar con una multa. Somos pobres, no nos gustan las multas.
De ahí, encontrar la puerta de un terreno abandonado… Donde, de repente,
apareció un tipo en la lejanía. No nos vio. Fuimos afortunados. Ese lugar fue donde
empezó el rodaje el penúltimo día.
-Cementerios abandonados
Comenzamos
desde las ocho el rodaje del día 2 de mayo en una puerta abandonada de un terreno
aparentemente despejado. Teníamos una zona que daba el pego. Lo malo eran los
curiosos que pasaban y tocaban la pita de sus coches, soltaban frases imbéciles
y todas esas chorradas (¿recordáis el making of? Pues eso).
Ese día de rodaje contamos con una extra que supondría un buen punto de
inflexión: Atha. Puedo resumir quién es en: ¿recuerdas a esa chica rara que te
caía bien en el instituto? Pues esa era Atha y yo también fui raro en el
instituto.
La puerta de un cementerio. |
Atha se ha dedicado al mundo de la música y la actuación, le
gustan los vampiros y esas movidas que me encantan, así que fue genial que se
viniese todo un día para interpretar a un personaje extra. Ya la veréis, es
maravillosa. Se aprendió su única frase (bastante larga) y supo concienciarse
muy bien de su papel. Desde aquí, darle las gracias por ayudarnos tanto. Sin
ella, no hubiera molado tanto.
En esas secuencias también estaba Lydia, nuestra maquilladora oficial.
Ya veréis cómo se ha transformado. Sólo puedo decir que ha interpretado a una
Muerte genial que le encantaría incluso al bueno de Neil Gaiman. Por ahora, me
guardo sus imágenes para que os vayáis preparando. Os gustará.
Tras unas tres horas grabando en el cementerio, nos fuimos hasta una
avenida a rodar cómo uno de los personajes huía. Debéis saber lo difícil que es
grabar a alguien corriendo cuando no tienes grandes medios.
En fin, que contamos con la ayuda de un vecino de la zona que decidió no molestar con su coche y demás. Fue genial, gracias desde aquí a ese ciudadano anónimo que se portó como un campeón, al igual que todos los actores y actrices, que Els y Atha. Sois geniales.
En fin, que contamos con la ayuda de un vecino de la zona que decidió no molestar con su coche y demás. Fue genial, gracias desde aquí a ese ciudadano anónimo que se portó como un campeón, al igual que todos los actores y actrices, que Els y Atha. Sois geniales.
Una Muerte que es toda simpatía. |
-Cine, cine, cine, cine, más cine, por favor…
Chorradas mías
Si puedo
definir el rodaje de por la tarde es de: raro de narices. Mucha improvisación
y, milagrosamente, ¡salió bien!
Decidimos contar la historia de una cola del cine para ver una película
ñoña y cursi. Casi de manera improvisada contamos con Cristian, uno de los
talentos de mi clase de periodismo, que se convirtió en nuestro reportero
invitado. ¿Entendéis algo? Creo que no y creo que eso es bueno, cuando veáis el
cortometraje os sorprenderá muchísimo más. Os lo prometo.
Después, contamos cómo se tomaban unos espectadores la película ñoña en
cuestión. Nuestro protagonista no está solo, atentos a nuestro extra Salvador,
quien iba a ser el vampiro al principio y después no pudo.
Es genial, me reí mucho rodándola y agradezco desde aquí al grupo del corto de Cristian, quienes se vinieron al “cine” para aumentar el número de gente en la sala. Conté con su colaboración y, por ello, sólo puedo dar las gracias (y bueno, ellos se ganaron un cameo mío en su corto… Bueno, creo que por eso he de pedir disculpas. No sé hacer cameos).
Es genial, me reí mucho rodándola y agradezco desde aquí al grupo del corto de Cristian, quienes se vinieron al “cine” para aumentar el número de gente en la sala. Conté con su colaboración y, por ello, sólo puedo dar las gracias (y bueno, ellos se ganaron un cameo mío en su corto… Bueno, creo que por eso he de pedir disculpas. No sé hacer cameos).
Después de varios gritos y diálogos, el corto había concluido su
penúltimo día de rodaje. Tras pasar las imágenes, esperar y demás, habíamos
dado por concluido el día segundo.
La Muerte haciendo amigos; la chica es Atha. |
Más tarde, viendo de nuevos las tomas, hubo una que no pare de repetir.
Me parecía desternillante por lo rara... que era. Espero que al resto de la
gente le parezca igual. Dar desde aquí las gracias a Abraham por aportar su
vena para comerse la escena y convertirse en un Han Solo de la vida (secundario
que acaba robando secuencias y más secuencias).
Después, se me ocurrió, para dar ambientación, grabar unos diálogos
breves de la película falsa que están viendo. Quiero decir, grabamos un par de
frases para que sonasen de fondo mientras vemos la reacción del público, esas
frases son de la película falsa que están viendo. Creo que cuando lo veáis, lo
entenderéis.
Me temo que no he escrito peores frases en mi vida, muy acordes con la
falsa película que están viendo. El viernes, que grabamos el podcast
“Vigilantes”, conté con la ayuda de Elena y Luis (nuestro compañero de
“Vigilantes”) para dar voz a dos personajes… El tercero… Le di yo voz. Ese es
mi gran cameo. Ay…
Ya sólo quedaba un día, pero sabía que iba a ser el más complicado,
porque no teníamos ningún lugar donde rodarla, nos faltaba un extra, saber si
iba a ir uno de los actores… Y demás.
Al final, todo salió mejor de lo esperado.
Dos fanáticas de "Perdona, querida, si te digo que mi abuela es un kraken". |
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Puedes comentar mediante nick, anónimamente o con tu cuenta de correo o similar. No almacenamos ninguna información.
¡Muchas gracias por tu comentario!