Y allá vamos.
A finales de diciembre de 2022 publicaré Historias de la Máquina del Caos, mi primera colección de relatos. Estará disponible de forma gratuita, en digital, en mi newsletter durante un mes antes de dar su salto a Amazon.
Las historias de los cuentos
La colección incluye dieciséis relatos de terror, fantasía y ciencia ficción, aparte de un prólogo y un epílogo, que sirven como nexo de las historias, y un “últimas palabras”, donde explico el recorrido de cada cuento.
Los cuentos incluidos son los siguientes:
- JUDY, TE QUIERO: un chico se enamora de una compañera de clase. Ella acaba de morir.
- EL PRÍNCIPE AZUL SE CORTÓ LAS VENAS: dos detectives investigan el suicidio de un hombre aparentemente feliz. Su sangre es azul.
- UNFORGETTABLE: dos agentes buscan a un hombre que posee un gran secreto en su memoria. El problema es que el objetivo padece Alzheimer.
- EL TRIPULANTE SOLITARIO: un astronauta divisa un nuevo mundo, pero si existen las casas encantadas, ¿no es posible que existan los planetas habitados por fantasmas?
- NUNCA CRUCES EL PUENTE: dos niños hacen algo que no deberían. Y una madre espera en la oscuridad.
- MATARÁS A EVA: cuando una asesina en serie va a ser ejecutada, Eva descubre un siniestro culto.
- UN BOSQUE DE SANGRE: un extranjero vaga por un desierto de nieve. Un extraño llega a una aldea japonesa. Pronto habrá sangre.
- UNA HISTORIA DEL INSTITUTO: el último día de clase antes del verano, un profesor recuerda cuando fue estudiante y narra la historia de cómo murieron varios de sus compañeros.
- EL CORAZÓN EN UN CANDADO: una joven enamorada sigue a su novio hasta un callejón lleno de corazones, no todos de metal.
- QUINCE PIES DE PURA NIEVE BLANCA: una niña inuit se propone evitar el fin del mundo, pero ¿puede?
- UN DETECTIVE EN NAVIDAD: un investigador privado es contratado por un viejo gordo y paranoico: Santa Claus.
- PRISIONERO DE UN MUNDO FELIZ: el creador de unos cascos que crean una realidad virtual a cada usuario contempla su nuevo mundo.
- CASO: TERRÍCOLA CONTRA EL UNIVERSO: un humano demanda a todas las galaxias para evitar que la Tierra sea destruida.
- EL DÍA DEL PADRE: el hijo pródigo vuelve a casa. Con una pistola.
- SOLO SABEMOS QUE ESTAMOS AQUÍ: una mujer buena y un hombre horrible. Un secreto.
- EL PUNTO FINAL: alguien descubre que está a punto de morir cuando el escritor de su vida ponga punto final a la historia. ¿Podrá evitarlo?
La historia tras la Máquina del Caos
Este libro no ha sido fácil, pero si es una recopilación de cuentos que escribí durante los últimos años, ¿por qué no ha sido sencillo? Porque, en realidad, nada lo es.
Y eso que amo los cuentos. Desde 2016 rondaba por mi cabeza la idea de recopilar varios de mis relatos en una sola colección. Para mí, este formato fue un largo entrenamiento donde, de un modo casi febril, podía liberar una idea que rondaba mi cabeza.
En mi papel de lector, era un modo de descubrir lo imposible en poco espacio. Como señalaba Neil Gaiman:
“Los cuentos son ventanas diminutas que nos permiten asomarnos a otros mundos, a otras formas de pensamiento, a otros sueños. Son vehículos que nos transportan hasta los confines del universo y nos traen de vuelta a casa a tiempo para cenar”.
El origen del caos
Me gustan mucho las colecciones de cuentos, como El hombre ilustrado de Ray Bradbury o Los Libros de Sangre de Clive Barker. Y tienen algo en común: precisamente, un nexo que unifica todas las historias, como los antiguos cómics de Creepy. ¿Cuál podía ser ese enlace en mis cuentos?
Por ese entonces, me torturaba con la idea de qué habría pasado en mi vida si hubiera tomado otra decisión. Recuerdo especialmente una entrevista de trabajo para ser reportero; en ella me preguntaron si era capaz de hacer llorar a alguien ante cámara para subir la audiencia. Mis padres me enseñaron a ser muchas cosas, pero no una mala persona.
Y yo, pobre chaval de veintitantos, amaba el periodismo cultural y recuerdo la cara que se les quedó cuando les pregunté si en el programa no había nada cultural, solo… de aquello que ellos consideraban que les daba audiencia. Por supuesto, no me volvieron a llamar, pero seguí dándole vueltas a los errores que había cometido.
¿Por qué estudié para ser periodista? ¿Por qué no para ser profesor, que era algo que había comenzado a llenarme? ¿Hubiera sido feliz de haber hecho eso?
¿Qué harías si no fueras tú?
Y de ahí nació la premisa de la Máquina del Caos: ¿y si existiese un artefacto que te permitiese vivir tus otras vidas? Cada vez que tomamos una decisión, se abre una nueva línea temporal. ¿Y si pudiéramos visitar esa vida paralela?
Se me ocurrió hasta el título allá por enero o febrero de 2016, pero no fue hasta mucho después que me imaginé al personaje anónimo que sirve de comienzo de este libro. Tras decirle el doctor que le queda muy poco tiempo de vida, ella encuentra la Máquina del Caos y, cada cuento, es una de sus posibles vidas.
El largo camino a casa
De esa manera, me propuse recopilar todos los relatos que había escrito desde que, allá por finales de 2010, me puse a escribir un cuento diario.
Decía Ray Bradbury en El zen en el arte de escribir que si escribimos cada semana un relato, notaremos cómo vamos mejorando con el paso de los días. Es imposible escribir cincuenta y dos cuentos malos.
En mi caso, sé que dejé muchos por el camino durante la revisión e intenté conservar aquellos que suponían algo para mí. De 2016 a 2018, fui espantando cuentos y dejando otros que todavía sentía que decían algo.
Era como volver a casa. A una casa llena de fantasmas.
Sangre, caos y tinta
Allá por 2020, revisé la Máquina del Caos durante la pandemia que hizo que el mundo estuviese más cerca de una distopía que de una ucronía. Quería acabar con la Máquina. No conté con mis propios demonios.
El paso de la correctora y el apuñalamiento de mis dudas me hizo pensar: ¿necesita el mundo historias de terror o ciencia ficción cuando acaba de vivir su propia historia de terror y ciencia ficción? E Historias de la Máquina del Caos esperó, corregida, en el cajón.
Y de vez en cuando, latía, como un corazón delator.
Demonios
Durante los dos siguientes años, algunos de esos relatos fueron reescritos y encontraron nueva vida en algunas revistas que me concedieron el honor de publicar con ellas, como es el caso de Círculo de Lovecraft.
Y disfruté de volverlas a leer como si fueran artilugios que me permitiesen viajar en el tiempo y volver a conocer el escritor que fui. Decía Clive Barker en su introducción de Los Libros de Sangre, que morimos cada día. Era una forma de reflexionar sobre cómo él mismo se había topado con el que fue cuando concibió aquellos oscuros cuentos.
Y yo me crucé conmigo mismo. Nunca es agradable.
Bajar es lo peor
Fue en 2022 cuando tomé la decisión de encender la Máquina del Caos por última vez y compartirla con el único deseo de que se marchase, de apagar las llamas de un infierno que se ha prolongado demasiado.
En la reedición de Bajar es lo peor, la maestra del cuento Mariana Enríquez hablaba sobre cómo no había releído su primera novela. Sabía que no era perfecta, pero en ella estaba la fuerza oscura que la impulsó a crear en sus primeros días.
En mi caso, aunque pasó por una relectura y la corrección de una profesional (Un bosque de sangre, no obstante, cambió muchísimo y ni os cuento de Una historia del instituto), el resto de los cuentos aparecen de un modo muy similar a como fueron publicados en su día. Y espero que los impulsos oscuros que me llevaron a escribirlos sigan ahí, guardados, como fantasmas.
Conclusiones
Aguardo que el lector pueda disfrutar de estas pesadillas y sueños de alguien que durante mucho tiempo se ha peleado con sus propias historias. Al encender esta Máquina del Caos, siento que cierro una puerta de mi vida. Y eso es bueno.
Ojalá algunos encuentren en Historias de la Máquina del Caos un atisbo de lo que más anhelen en ese inmenso universo de posibilidades que es el infinito. Leemos y escribimos para eso.
Puedes suscribirte a la newsletter en el siguiente formulario:
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Puedes comentar mediante nick, anónimamente o con tu cuenta de correo o similar. No almacenamos ninguna información.
¡Muchas gracias por tu comentario!