Ninguna novela ni otra forma artística surge completamente de la nada. El hecho de leer libros o cómics, o ver películas o series, nos permite nutrirnos de ideas que alimentan nuestras historias. Por eso, para mí, es sumamente importante habituarme a leer y ver todo lo que pueda: hace que mis obras crezcan (y yo mismo). En La Eternidad del Infinito hay varias creaciones que me influenciaron:
- Death Note: hay un personaje que es un pequeño guiño al aspecto de L: ojeras, aspecto enmarañado... No es un detective ni similar, pero me gustaba su look para un siniestro joven que es capaz de dibujar el futuro con un estilo que recuerda a... Junji Ito, el mangaka japonés.
- Sweeney Todd: la novela trata de una venganza que podría condenar a todos los que rodean al personaje de Akane de Vries, una villana que me ha encantado escribir en todo momento. Este musical siempre me ha gustado y quise transmitir su atmósfera visceral. ¿Qué harías con tal de vengarte?
- Pesadilla antes de Navidad: me marcó de crío (la escena del niño sacando la cabeza reseca, momificada y en miniatura de la caja de regalo para enseñársela a sus padres...) y quise hacer un homenaje a esta película tan especial con un personaje bastante "macabro": el Restaurador de OFF. La obra transcurre el 15 de agosto (el día del cumple de Gwen), así que... sí, es bastante antes de Navidad.
- One Punch Man: Saitama es un personaje que parece rematadamente simple, pero ¿y si ese fuera su superpoder? Su cara y sus gestos me influyeron levemente a la hora de crear a Dem, el chico que busca curro desesperadamente. Al principio, pensé que debía ser rematadamente idiota, pero, al final, Dem fue convirtiéndose en un personaje complejo, como el propio Saitama.
- Doctor Who, amor y monstruos: es un episodio que muchos fans de la serie británica odian y a mí me encantó desde que lo vi por primera vez. En esta novela, quise centrarme en los personajes secundarios y narrar una historia donde Devon, Gwen y su mundo mágico sean vistos desde la perspectiva de Dem, alguien normal y corriente. Esa cuestión me dio muchísimo juego.
- Tokyo Ghoul: el mundo de Devon no es brillante, lleno de purpurina y cosas bonitas; a menudo, hay mucha oscuridad en él. En esta novela, tenemos al wendigo, caníbales, ojos negros... y un submundo más siniestro que el Mercado Negro. Para ello, me inspiré en la obra de Sui Ishida.
- Buffy Cazavampiros, Once more, with feeling: el capítulo musical de Buffy y uno de mis favoritos de la serie tiene un guiño al principio del libro: cuando Devon y Helena se enfrentan a la Emperatriz Sonora, una villana que produce epidemias de baile y canciones allá por donde pasa. Me cuesta muchísimo escribir con rimas y solo produzco ripios horripilantes, pero creo que es parte de la gracia. A pocos nos gustaría empezar a cantar de pronto... y no somos Garcilaso cuadrando versos.
- Guía del autoestopista galáctico: siempre me gustó el humor entre el ridículo y la sátira más inteligente del gran Douglas Adams. Yo me temo que no soy tan gracioso (ni por asomo), pero lo intenté enfocando la historia desde ese lado tan mundano que hace que veamos lo fantástico como algo corriente, cuando a nuestro alrededor ocurren cosas interesantísimas. El esperpento de Valle-Inclán siempre me ha fascinado, no obstante.
- Los hijos de Anansi: una novela de Neil Gaiman que leí sin esperarme que se convirtiese en una de mis favoritas y... vaya si lo logró, ¡no dejo de recomendarla! La historia de estos personajes, entre el humor y el submundo mágico de Gaiman, se transformó en una de mis obras de cabecera. Quise transmitir esos sentimientos a mi obra, igual que el uso de los capítulos con nombres que resumen la trama, los personajes estrafalarios, etc.
Y hasta aquí este comentario sobre obras que me han influenciado para escribir el libro. Considero que hay algunas obras más como Top Ten de Alan Moore y Gene Ha, Noragami de Adachitoka y Mundodisco de Terry Pratchett, pero he querido centrarme solo en algunas y dejar que vosotros descubráis las otras.
Para ello, podéis leer la obra en versión digital aquí.
Seguid atentos el blog y mis redes sociales, porque pronto anunciaré la publicación de la versión física.
Muchas gracias por leerme.
¡Saludos monstruosos! ¡Nos vemos en los libros!
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