Nosferatu, cuando temíamos a los vampiros

Una de las imágenes más conocidas de Nosferatu de MurnauFuente.
Un horrendo monstruo llega a Londres y siembra el terror, siguiendo su sed de sangre. ¿Cómo se podría vencer a un no muerto, un nosferatu?

Nosferatu es conocida como Una sinfonía de terror. Pero ¿qué es una sinfonía de terror? ¿La suma de monstruo, horror y música? ¿O más bien ese escalofrío que nos recorre cuando vemos esta cinta del expresionismo alemán? Seguramente, una sinfonía de terror sea todo eso.

Caen las sombras…

Sin una sola palabra más allá de las que aparecen escritas (es muda), pero con la habilidad de Murnau, el espíritu del Drácula de Stoker, el toque tenebroso y el aspecto del actor Max Schreck se forjó Nosferatu, una de las películas más tenebrosas de la historia del séptimo arte.

El argumento es muy similar al Drácula de Bram Stoker. Murnau planeaba una adaptación de la famosa obra, pero el problema con los derechos lo llevó a cambiar nombres, escenas… Aún así, en algunas copias aparece la frase de “basado libremente en Drácula”. El problema de los derechos hizo que muchas cintas fuesen destruidas, pero, por suerte, algunas pervivieron. Hubiera sido una increíble pérdida para el naciente cine saber que Nosferatu moría definitivamente bajo la luz.

De ahí que Thomas Hutter, el protagonista, nos recuerde a Jonathan Harker o la damisela Ellen sea muy parecida a Mina. A su vez, el conde Orlok no es otro que Drácula. La historia aportaría algo más que nombres repetidos, como imágenes lúgubres véase la estética.

Max Schreck no tardaría en transformarse en una de las imágenes no solo más emblemáticas del terror, sino del cine en general. Su físico extraño sería aún más superlativo que el de Conrad Veidt y su Cesare de El gabinete del doctor Caligari (sin duda, dos de mis monstruos favoritos de todos los tiempos). Schreck, no solo tenía un apellido que en alemán significa “susto”, también parecía un auténtico vampiro (véase La sombra del vampiro), esa bestia imaginada en leyendas durante décadas antes, ese ser aparecido en docenas de novelas, esa criatura en la eterna oscuridad, incapaz de ver la luz, incapaz de sentir la redención.

Nosferatu surge de las tinieblas de su ataúd. Fuente.
El vampiro surgiría así no solo como una muestra de nuestros más oscuros deseos o cómo nuestros más bajos instintos nos mueven hasta la monstruosidad. Nosferatu no es enamoradizo, no es romántico (en el sentido actual, sí quizás en el sentido del movimiento literario), es una bestia, trágica sí (si somos clementes), pero bestia al fin y al cabo. No hay nada bueno ya en este vampiro y está obligado a terminar mal, está condenado.

Pese a que sigue siendo una película más que recomendable, Nosferatu no ha envejecido del todo bien. Hay escenas que las cámaras rápidas no terminan de encajar o la cinta ha degradado parte de su calidad y no se disfruta del todo visualmente; añadimos que era el inicio del cine y su experimentación aún no era clara (se jugaba aún con los planos de forma lenta y demás)... Pero poco importan esos nimios fallos. 

Aunque la trama es simple, sigue siendo una fuente de inspiración. Que se lo digan a Francis Ford Coppola y su Drácula de Bram Stoker cuyos inicios son muy, muy similares incluso en los usos visuales. Y ya que estamos, a ese deudor del cine expresionista alemán que es Tim Burton.

Esos pequeños defectos señalados en el párrafo anterior hacen que un servidor prefiera El gabinete del doctor Caligari, aunque ambas son cintas más que fascinantes, filmes que, a todos aquellos que les guste el cine fantástico o de terror, debería ver antes de morir. Son joyas que realmente valen la pena.

Nosferatu es uno de los símbolos del mito vampírico, un estandarte del expresionismo alemán, pero, sobre todo, un emblema del terror y la magnificencia del cine. Cuidad vuestros cuellos, nunca se sabe que sombra avanza por el pasillo.

"¡SANGRE! ¡Tu hermosa sangre!"- CONDE ORLOK.

6 comentarios:

  1. Me ha encantado el titulo "cuando temíamos a los vampiros" es genial, pensar en acabar como el Conde Orlok si produce escalofrios.

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    1. Hola, Shilmulo

      Me alegro que te haya gustado el título de la crítica. Para mí es una idea importante. No detesto los vampiros de Anne Rice que siguen tras tanto dilema, siendo monstruos. Detesto más los de última generación convertidos en chavales salidos del Zara o el Bershka (si lo he escrito mal es para que no me denuncien xD).

      Un saludo y muchísimas gracias por tu comentario. =D

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  2. Palabras mayores. Mi películas favorita del expresionismo. Schreck da miedo. Jamás dejará de estremecerme este señor.
    Me encanta el juego con sombras de Murnau. Un genio. Cuando el terror daba obras maestras y no secuelas basuras maestras.
    Poco mas puedo añadir a tu excelente critica así que mejor me callo.

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    1. Hola, Pedro

      Mi película favorita del expresionismo sería "El gabinete del doctor Caligari" y, aunque no es del todo, "Metrópolis". Luego, estaría "Nosferatu", aunque no he podido disfrutar mucho más. Lo intenté con la primera del "Doctor Mabusse", pero me pareció infinita -.-

      De acuerdo en todo lo que dices, menos que te calles jeje Siempre es bueno dar nuestras opiniones y siempre se aporta algo.

      Un saludo y gracias por tu comentario.

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  3. En esta ocasión he preferido buscar la película con subtítulos en español, que así tardo menos en verla y me entero a la primera XD.
    Que pena que los "vampiros" de ahora no sean como en Nosferatu.

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    1. Hola, Hitos

      Me alegro de que te haya gustado la película. Disculpas por no encontrarla con subtítulos.

      Muchísimas gracias por tu comentario, un saludo.

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