Esta
ha sido una semana bastante nefasta en algunos puntos de mi vida, entre ellos,
la escritura que no he tocado casi nada por culpa de lo que me
rodean. Pero en fin, podría ser peor.
El viernes se presentó un libro donde
aparecen dos microrrelatos míos, entre cientos más de otros autores. Cuesta veinte euros. Considero que ya que
nadie recibirá un duro por ceder sus microrrelatos, podrían haber dado algún
ejemplar gratuito. Pero no, había que pagarlo, y hubo cosas que no me gustaron…
Y fui casi de casualidad. No a la
presentación, pero sí cerca de donde tenía lugar el acto: a la puerta. Lo evité
durante toda la tarde, pero acabé yendo.
Es un centro comercial y
el libro no estaba entre los libros de la sección dedicada a estos, estaban
fuera del lugar donde se presentaba.
Bueno, llegaba tarde, no había problema.
Después de encontrarme con unos compañeros
de la universidad (uno de ellos publicó y tenía el libro en sus manos) y tras
advertirles de que les robaría el libro para fotocopiarlo, fui hasta allá
arriba y cogí el libro, busqué los dos microrrelatos (uno ya ni recordaba cómo
se llamaba, sinceramente) y tras echar un vistazo, acabé dejándolo.
No lo compré. No me gustan muchas cosas
ocurridas en torno a este libro (ni siquiera cuando escribí el primer
microrrelato, el que más me gusta, el que más sensaciones horribles me trae del
momento en el que lo escribí).
Me marché con la sensación de dejar algo
atrás. Pensé en robarlo, pero soy demasiado honrado para esas cosas (y no soy
honrado para mentir en el papel, ¡cosas mías!).
En fin, ya se ha publicado algo que he
escrito. Era un viejo propósito. Podría ser más amargo, también más dulce, pero
sigo tecleando. La hiel y la miel solo están a un par de teclas de distancia.
Prometo esta semana, si la universidad y la
gente de mi entorno me lo permite, escribir un poco más. Eso espero.
Muchas felicidades porque te hayan publicado. Pero lamento que lo hayan hecho así.
ResponderEliminarQue te publiquen es una buena noticia siempre, eso significa que vas creciendo y dandote a conocer, pero el modo en el que lo han hecho me parece despreciable. Sin tus microrrelatos no hubiese libro o sería un libro mas corto y ni siquiera te dan una copia. Lamentable.
Hola, Pedro
EliminarMuchas gracias por tus palabras. Considero que al menos es algo y siempre es bueno eso de atraer la leyenda negra en torno a mi imagen como escritor (porque todo eso es solo imagen, es solo lo que pretendo ser para que me compren).
Han conseguido que publiquen más de cien personas, sin mis microrrelatos seguiría siendo lo que es.
En fin, esto es España, aquí adoramos a los futbolistas, nos burlamos de los escritores y disfrutamos de la necedad de nuestros días.
Gracias por tu comentario.
Sigue trabajando, ya sabes que obtendrás frutos por ello. Si no en este, el siguiente.
ResponderEliminarMucho ánimo y enhorabuena, es algo a lo que muchos aspiran pero no
logran. Lo malo son las condiciones y el feo detalle que han tenido.
¿Como se llama el libro? Tus relatos quisiera leerlos.
Hola, Rondi
EliminarSí, considero que sería algo digno de muchos estúpidos que conozco lo de rendirse y caer de rodillas por un puñetazo. Para tumbarme se necesita algo más que eso y se lo recomiendo a todo el mundo.
Sobre el libro, no creo que necesite publicidad por mi parte. Tienes varios microrrelatos en la etiqueta con ese nombre. Si quieres leer los publicados y no he perdido los derechos, supongo que algún día los colgaré por aquí.
Gracias por tu comentario, un saludo. =)
Lo más lógico hubiera sido que te diesen algún ejemplar gratuito, al menos uno. Pero al menos te vas expandiendo, que ya me gustaría a mí que me publicaran aunque sea un breve relato...
ResponderEliminarEsta entrada me hace pensar ¿alguna vez un escritor ha robado un libro que haya escrito él mismo? Sería una anécdota de lo más curiosa XD.
Hola, Hitos
EliminarNo creas, no pienso que la gente que lo compre pase de leer el propio y con el resto lo use de papel higiénico o para algo peor cuando le haga falta. Es un ejercicio de ego.
Sobre expandirse, intenta con las revistas digitales. Son más útiles que otras cosillas.
Sobre esa anécdota, creo que será real. Tú déjame cinco minutos más y usaré el billete de los cinco dedos... Ya me entiendes.
Muchas gracias por tu comentario, un saludo. =)
Vaya. Se supone que uno debería estar exultante con un libro ¡UN LIBRO! donde sale publicado. Aunque claro, nadie sabe cómo estará ese día. Igual se muere mi perro (lo cual sería curioso, porque ni he enviado a editorial ni tengo perro). Continúa escribiendo. Ya habrá éxitos más dulces que este. Más tuyos.
ResponderEliminarHola, Misery
EliminarContinuaré escribiendo y quizás publiquen algo y todo, ¿por qué no? Vivir la vida de otro debe ser demasiado aburrida a menos que la escribas y eso te haga vivir la tuya.
Esto no es un final, solo es algo más para la leyenda negra. Hacía falta.
Gracias por tu comentario.