Que la animación es uno de los campos donde Star Wars nos ha dado más alegrías en las últimas décadas es una verdad indiscutible. Clone Wars, Rebels, Visions o la recientemente concluida The Bad Batch son obras maravillosas, sin las cuales la saga no sería la misma.
Tales of the Empire es la secuela de Tales of the Jedi, una serie de seis cortos divididos en dos arcos. Si la dedicada a los Caballeros Jedi se centró en Ahsoka Tano y el Conde Dooku, la que pone el foco en los siervos del Emperador Palpatine ha tenido como protagonistas a la Magistrada Morgan Elsbeth y a la Jedi caída Barriss Offee. Pero si bien la dedicada al Lado Luminoso brilló como una de las mejores piezas de la saga, la segunda ha quedado opacada por su deber de rellenar huecos y sorprender lo justo.
El problema de los huecos
Me explico: uno de mis debates habituales con otros aficionados a la saga es si queda algo por contar de Star Wars. En mi caso, creo que sí, si bien reconozco que períodos como el dedicado a la Rebelión están cada vez más minados por relatos, cómics, películas, series, videojuegos… que coartan, hasta cierto punto, la libertad creativa. No es fácil contar algo nuevo cuando por el camino tienes cientos de obras que tener en cuenta. Y recordemos que por mucho que la saga hable de rebeldes, sus aficionados suelen ser bastante puristas y defensores del llamado Canon™, lo que hace que se generen discusiones tan apasionantes como si un clon iba con una armadura blanca en The Bad Batch o roja en un cómic sobre Kanan Jarrus. Ese es el nivel.
Crítica de Tales of the Empire, serie de cortos de #StarWars que nos habla de Morgan Elsbeth y Barriss Offee. Share on XPero a lo que iba es que cada vez la saga parece menos flexible en algunos períodos y eso impide que nos sorprendamos. Ocurre, sobre todo, con el primer arco de este Tales of the Empire, donde se añaden algunos detalles sobre Morgan Elsbeth: cómo perdió todo en Dathomir por culpa de Grievous, cómo conoce a Thrawn antes de ser almirante y cómo llega al planeta Corvus donde la conoceremos en The Mandalorian… Pese a que le dedica más tiempo al personaje de Diana Lee Inosanto, tampoco aporta en demasía.
El destino de la Jedi caída
El segundo arco es más interesante, con la Jedi que traicionó a Ahsoka Tano en The Clone Wars: Barriss Offee, un personaje que aparece en un más que segundo plano en las películas pero que, por obra y gracia del Universo Expandido, se ha convertido en uno sobre los que los fans siempre se hacían preguntas… preguntas que aquí son respondidas por el equipo de Dave Filoni al convertirla en uno de los Inquisidores dedicados a cazar Jedi durante la Purga.
Puede que uno de los problemas de esta “secuela” sea la duración. Si bien el escaso metraje era bien aprovechado en Tales of the Jedi, en Tales of the Empire se nota para mal, haciendo que algunos cambios, como los que se producen en la historia de la inquisidora, se sientan precipitados. Y, pese a todo, es el que momentos más interesantes tiene, cómo el enfrentamiento de Barriss con el Primer Inquisidor o con su supuesta “maestra”, la Cuarta Hermana, que protagoniza una de las escenas más oscuras vistas en Star Wars. Además, se rescata un tema fundamental en la saga: la redención. Lástima que con esta y la otra historia se hiciesen demasiados spoilers en el tráiler de marras.
¿Merece la pena lo que cuenta?
La predecesora de Tales of the Empire fue magistral por cómo añadía piezas al mosaico y también nuevas lecturas, como el destino de Ahsoka o cómo Mace Windu es el gran “villano” secreto de toda la saga: sin él, el Lado Oscuro no habría vencido, por ejemplo. En cambio, Tales of the Empire no ofrece esas lecturas. Ya sabemos que Morgan Elsbeth es guiada por su odio, su servidumbre a Thrawn y que es una Hermana de la Noche, como vimos en The Mandalorian y Ahsoka.
En cambio, aunque Barriss Offee agrega un poco de trasfondo a la miniserie de Obi-Wan Kenobi, Rebels o Ahsoka, en realidad el destino de su protagonista tampoco resulta tan llamativo al menos en esta temporada (salvo que su “antigua amiga” sea el personaje que creemos que es).
Del mismo modo, aunque como suele decirse “las comparaciones sean odiosas”, la música tampoco llega a ser tan impresionante como en Tales of the Jedi (la única excepción es el tema dedicado a la Cuarta Hermana durante su cacería por la montaña de hielo).
Conclusiones
Y pese a los problemas que podamos señalar, es indudable que estamos ante dos buenas historias, entretenidas, contadas con un gran talento e imaginación, con una fotografía que ya querrían muchísimas películas que se estrenan en la gran pantalla.
Como decíamos al principio, Star Wars sigue siendo uno de los campos donde más brilla la saga creada por George Lucas y, aunque no destaque en demasía con Tales of the Jedi, es indudable que todavía queda cariño en este regalo estrenado el 4 de mayo, el Día de Star Wars. Ojalá nunca nos quedemos sin historias.
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