Drácula de James Tynion IV y Martin Simmonds

Critica-drácula — Hablamos de la reimaginación de Drácula que ha hecho James Tynion IV en el guion y Martin Simmonds en el dibujo.

¡Ah, Drácula! El conde transilvano es como el Lucifer de los Rolling Stones: no necesita introducción, aunque deberíamos decir que en esta ocasión no nos referimos directamente al clásico literario de Bram Stoker, sino al Drácula de Bela Lugosi (el que muchos tenemos en la cabeza -con permiso de Gary Oldman– cuando pensamos en el famoso vampiro con capa y acento extraño).

Lejos de «cosas» como el Drácula Untold que a muchos les hizo perder puntos de cordura, esta vez estamos ante una versión renovada (otra vez) del amo de los vampiros de la Universal y en formato cómic. ¿Y quién mejor para hacerla que James Tynion IV, el guionista que ha traído la paranoia y el terror con El departamento de la verdad y Hay algo matando niños?

Larga vida al rey de los vampiros

La editorial Skybound y la productora Universal se han unido en esta nueva aventura con la idea de darle un aire fresco a sus clásicos monstruos del terror, y han empezado por el más icónico de todos. Parece que Frankenstein y La Criatura de la Laguna Negra están en camino también, pero ya veremos si tienen más suerte que la desafortunada Momia de Tom Cruise (porque todos sabemos cómo acabó eso)… aunque, con Tynion al timón, podríamos estar ante algo mucho más interesante.

En esta versión, Tynion toma una decisión arriesgada: centra la historia en Renfield, el pobre diablo siempre a la sombra de Drácula. El conde, reinterpretado aquí como una figura terrorífica pero distante, se convierte en un mero espectro. En ese aspecto, es bastante fiel a la novela: en ella, muchos personajes como Mina, Jonathan, Seward… tienen un punto de vista, pero Drácula jamás cuenta con uno. Todo un acierto de nuestro querido irlandés borracho, que diría Louis en Entrevista con el vampiro.

La idea de Tynion IV es un movimiento interesante, porque en lugar de llenar el cómic de las típicas escenas de Drácula acechando a sus víctimas, se opta por dejarlo como una presencia que se siente en el aire, lo que añade un tono de constante amenaza sin necesidad de que aparezca en cada viñeta. Es un enfoque sutil y oscuro, pero claro, aquí es donde viene el pero.

Crítica del cómic de Drácula de James Tynion IV y Martin Simmonds donde se reimagina el clásico de la Universal Share on X

La carga de la inmortalidad

Por desgracia, el cómic se siente un poco apresurado. En algunos momentos, si no eres un gran fan de la película de Todd Browning, puede que te pierdas ciertos detalles. La gran confrontación entre Van Helsing y Drácula, por ejemplo, brilla por su ausencia, lo cual puede dejar a algunos lectores con la sensación de que se han saltado una página o dos (no, no te has saltado ninguna, pero sí, algo falta). Del mismo modo, toda esa sensación de horror que construye el film original, aquí parece dependiente de que James Tynion IV vuelva a casa antes de las doce, así que todo se cuenta demasiado rápido. En resumen, es un retelling que no se toma todo el tiempo que debería para desarrollar algunas de las mejores partes del film.

Pero hablemos de lo que realmente destaca: el arte. Martin Simmonds, que ya nos había dejado boquiabiertos con su trabajo en El departamento de la verdad (donde trabajo también con Tynion), está en plena forma aquí. Su estilo mezcla lo siniestro con lo onírico. Este tipo de arte, que parece sacado de una pesadilla y que se mueve entre lo grotesco y lo bello con total facilidad, lo une a maestros como Dave McKean, Bill Sienkiewicz o Ben Templesmith. Si no eres de esa gente aburrida que dice detestarlos, te va a encantar el trabajo de Simmonds, ya que sabe cómo envolver la historia en sombras, creando un ambiente cargado de misterio y tensión, y eso es, sin duda, el plato fuerte de esta obra.

Dracula Martin Simmonds — Curiosamente, un personaje desquiciado como Renfield ha capturado la imaginación de los lectores en los últimos años, dándole cada vez más peso en la trama.

Conclusión

En resumen, esta versión de Drácula es un cómic que encantará a los fans del conde transilvano, pero puede dejar algo fríos a los que busquen una adaptación más fiel o desarrollada. James Tynion IV hace lo que mejor sabe hacer, y nos ofrece una historia retorcida con un giro argumental, pero está demasiado pendiente del reloj.

Pero, si te quedas por el arte, no te arrepentirás: Simmonds te atrapará con su estilo visual que parece estar siempre al borde de devorarte. Al menos, sacarás un par de salvapantallas interesantes.

Ahora solo queda esperar a ver qué tal les sale la versión de Frankenstein. Cruza los dedos, porque si se parece en algo a este Drácula, el monstruo está en buenas manos… solo esperamos que no cruce la noche tan rápido como para que ni siquiera veamos su sombra.