Una muestra del trabajo de la creadora española. Las ilustraciones de Victoria Francés siempre mezclan la fábula con el romanticismo gótico. Fuente. |
"Hechizada por épocas antiguas quedé por siempre..."- Victoria Francés.
Edgar Allan Poe, Bram Stoker, Joseph Sheridan Le Fanu, Gustavo Adolfo Bécquer, Guy de Maupassant, Anne Rice, Neil Gaiman, Tim Burton, James O'Barr... Varios grandes nombres surgen cuando miramos atrás y pensamos en el romanticismo y en la oscuridad del estilo gótico (más allá de épocas o momentos, este sentimiento siempre trasciende cualquier era). Personalmente, a esta lista siempre hay que sumar un nombre propio más y es el de la ilustradora Victoria Francés.
Conocí la obra de la ilustradora Victoria Francés en mi adolescencia. Recuerdo que, en aquella época en la que naufragaba por Internet buscando nuevos mundos, me topaba constantemente con el trabajo de la ilustradora. No sabía su nombre, no sabía quiénes habían sido la fuente de su arte, no sabía que era española... Pero me encantaba. Más tarde, descubrí su nombre y me acuerdo de aquella lista de libros para la biblioteca del instituto donde participé y, aparte de recomendar cómics de Alan Moore, pedí también Favole. Gracias a aquel 2008, supe más de su trabajo, trabajo que me ha acompañado desde entonces y sigue haciéndolo. Ahora, mientras tecleo esto, tengo al lado de mi destartalado portátil una copia del compendio con la trilogía, en una estupenda edición de Norma.
Desde entonces, las ilustraciones de Victoria Francés me han seguido como una demostración de la fuerza artística que existen en los cuentos y las obras góticas del pasado, en esa oscuridad y esa magia que muchos apreciamos.
Los personajes de Favole conjugan la magia de una literatura casi desaparecida, pero que renace con el trabajo de Victoria Francés. Fuente. |
El mundo de Victoria Francés
Ángeles de piedra, tumbas, lagos con reflejos fantasmales, pasajes de niebla, castillos, palacios, bosques impenetrables, sombras densas como la noche del alma... Todos estos elementos se conjugan bajo la mirada de Victoria Francés. "¿He llegado por fin al cielo?", se pregunta uno de los personajes de Francés y su prosa, como sus ilustraciones, recorren los pasajes más sombríos con cuestiones cuya respuesta nunca hallaremos.
Pasear por el trabajo de esta artista española es deambular por un palacio de imágenes melancólicas, cargadas de la magia, el encanto y la fascinación de aquellos que han escuchado la hermosa música de la noche, como diría cierto conde transilvano. Cada vez que he escrito una obra oscura, me he perdido de nuevo en los sentimientos que encontré en el Favole de Victoria Francés.
Hay ilustradores cuyo trabajo supone un mundo y, en el caso de Victoria Francés, es un mundo donde no me importaría perderme y adonde regreso cada cierto tiempo en busca de horizontes y penumbras. Es reencontrarme con Drácula, con las damas sepulcrales de Poe, con los relatos de Byron, con los cuentos de terror de Blackwood, con el temor sin nombre de aquellos autores y artistas que hallaron en las sombras su más profundo consuelo.
Favole es la trilogía compuesta por los tres libros de ilustraciones que la autora concibió como un todo: Lágrimas de piedra, Libera me y Gélida luz, que serían publicados en 2011 en un solo volumen de tapa dura, cuidada edición, que incluye diversos materiales extra, como, por ejemplo, bocetos o dibujos no incluidos finalmente en la obra y que nos permiten deambular por los mundos sombríos de Victoria Francés.
El amor, la muerte, el vampirismo y los cuentos de hadas danzan en la obra de Victoria Francés. Fuente. |
Arte y oscuridad
Favole es un homenaje a los cuentos góticos y las obras más clásicas, cargadas de epítetos, metáforas, lugares oscuros, cementerios, la mágica Venecia, Rumanía y todos esos enclaves donde vampiros, hadas, fantasmas y otros seres cohabitan bajo la penumbra del alma humana. Edgar Allan Poe escribió en uno de sus relatos más conocidos, que el monstruo fue emparedado en su tumba; Victoria Francés los libera de ella.
Narra la historia de un príncipe vampiro y una joven perdida, Favole, y de todos los personajes que se cruzan a su alrededor, desde fantasmas de damas ahogadas hasta niños huérfanos, sin dejar de lado a brujas vengativas y fuerzas más allá de nuestra comprensión. Todas las influencias de Victoria Francés se ven homenajeadas en la historia que acompaña a estas ilustraciones y, si uno las comparte, no es extraño que nos maravillemos con ellas.
El trazo de Francés, la utilización del color, el juego de luces, la conjugación de diferentes técnicas, el vestuario, el diseño de sus personajes... Cada rasgo de Francés se alinea para conformar una sola visión de su mundo, un universo particular compuesto de varios reflejos llevados al paroxismo, pero nunca una mera imitación de otros artistas. Es más, Francés es la autora que se ha convertido en la influencia de muchos otros, tanto dentro como fuera de nuestro país. Una maravilla y más si se tiene en cuenta a qué edad realizó estos dibujos la creadora, siendo muy joven, pero demostrando su talento. Y es que Victoria Francés comprende la realidad de sus personajes, de sus almas complejas, porque como dijo Mary Shelley de Frankenstein:
"El ángel caído se convierte en demonio de maldad. Sin embargo, incluso ese enemigo de Dios y del hombre tuvo amigos y aliados en su desolación; en cambio yo estoy solo".
Como decía, la obra de Victoria Francés ha cosechado una gran fama dentro y fuera de nuestras fronteras, a Favole le han seguido varios libros más y diversas ilustraciones para numerosos trabajos y productos derivados que han convertido su obra en símbolos para todas aquellas personas que abrazan las tinieblas. Posee diversos espacios en Internet donde comparte su arte y habla de su trabajo, como su instragam o su web (de obligada visita para aquellos cuyo trabajo nos encanta). Además, podemos ver su proceso creativo en acción durante las ferias donde firma y dibuja sobre la marcha.
Tras Favole, la carrera de Victoria Francés ha continuado con obras como Misty Circus, El corazón de Arlene, Mater Luna o El lamento del océano, donde su estilo ha tomado nuevos horizontes, sin perder el talento que hizo únicas sus primeras obras como Favole. No nos queda más que recomendar su trabajo a todos aquellos que no la conozcan y recordar a aquellos que sí que estamos ante una artista por la que debemos sentirnos orgullosos.
Decía Bram Stoker en Drácula que: "Las fauces del lobo son mejor lugar de descanso que la tumba del vampiro”. Favole juega con estas ideas, porque ¿qué se esconde en la oscuridad? ¿Qué nos espera cuando todas las luces se apagan? ¿Qué hay más allá de un alma trágica y condenada? ¿Qué podemos aguardar cuando naufragamos en las tinieblas? Favole puede ser ese candil o ese manto de tinieblas que nos transporte más allá de nuestro mundo, a otro donde tinta y sangre se mezclan en una noche eterna.
Decía Bram Stoker en Drácula que: "Las fauces del lobo son mejor lugar de descanso que la tumba del vampiro”. Favole juega con estas ideas, porque ¿qué se esconde en la oscuridad? ¿Qué nos espera cuando todas las luces se apagan? ¿Qué hay más allá de un alma trágica y condenada? ¿Qué podemos aguardar cuando naufragamos en las tinieblas? Favole puede ser ese candil o ese manto de tinieblas que nos transporte más allá de nuestro mundo, a otro donde tinta y sangre se mezclan en una noche eterna.
El vampiro según Victoria Francés. Fuente. |
Mundos sombríos y fascinantes, donde también está el deseo, la atracción.
ResponderEliminarQue talentosa ilustradora.
Y alguien debería dibujarla a ella, para inmortalizarla.
Saludos.
Creo que Victoria Francés se ha dibujado varias veces dentro de su obra o, algunos personajes, recuerdan a ella misma. ¿O quizás ella a sus personajes? Sea como sea, es una gran artista. Me alegro de que te guste su trabajo.
Eliminar¡Saludos!
Hola, mucho gusto, Victoria se dibujó a sí misma para modelar el personaje de Favole. En el caso de El lamento del océano, los modelos respectivos para la sirena y Zachary se llaman respectivamente Iris y Nathan
EliminarNo soy el único enamorado de su arte entonces. Tengo el Tarot Favole y he reconocido más de una carta en esas ilustraciones que escogiste, y estoy de acuerdo, uno se pierde mirando el trabajo que ha hecho hasta ahora, faltan las palabras para describirlo.
ResponderEliminar¡Un saludo!
Me alegra saber que a ti también te gusta el arte de Victoria Francés. Sus libros están muy bien también. Espero que algún día puedas leerlos si todavía no has podido. Sobre su tarot, no lo he podido ver en persona, solo en Internet, pero me encanta el diseño de cada una de las cartas.
Eliminar¡Muchas gracias por tu comentario!
Leí la trilogía de Favole y El Lamento del Océano y quedé enamorada de sus ilustraciones. Ahora, a buscar Misty Circus 😊❤️
ResponderEliminarMe alegra saber que hay más aficionadas a la obra de Victoria Francés. ^^ Muchísimas gracias por tu comentario, Carol.
Eliminar