Recupero este texto que escribí hace tanto tiempo sobre el famoso director de cine John Ford por el mero hecho de que me apetece. Recuerdo con cariño el trabajo de Ford, su biografía y tengo ganas de hablar de cine.
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Una madre llora desconsolada. Acaba de enterarse de que su hijo ha muerto. Las hojas otoñales caen… Y aparece un muchacho barriendo, se da cuenta de que están rodando una película, se asusta y echa a correr. Se ha colado en un plano de un film (Cuatro hijos, 1928) y el joven trabaja en attrezzo. “Nos reímos todos tanto que no pudimos trabajar en todo el día. Era algo tan preciosa [la escena] y se presenta este pedazo de carne barriendo las hojas. Él todavía se acuerda”, diría más tarde el director en la recomendable biografía que escribió Peter Bogdanovich.
Aquel “pedazo de carne” se llamaba John Wayne y acabaría siendo ¿un importante actor? No, the Duke era una leyenda del cine por algo. El director era John Ford, el mito que creó a la leyenda. Así fue cómo se conocieron dos estrellas.
La vida de John Ford está llena de situaciones así. Se hizo realizador porque no llegó el auténtico director a un rodaje tras una monumental fiesta. Se llamó Ford porque su hermano Francis (actor, director…) sustituyó a un actor llamado Ford –que se emborrachó y no pudo actuar- y nadie se percató del cambio. Señalaba a los productores (y solo señalaba tres cosas: la pastelería francesa y los retretes). Empleó a un conde como secundario sin saberlo. Plantó cara a Cecil B. DeMille y otros que colaboraron en la Caza de Brujas. Los descendientes de una tribu india lo nombraron como miembro honorífico por levantar la economía del Monument Valley con sus películas… Ford vivió una vida digna de película.
Su biopic arrancaría en Maine, criado por una pareja de emigrantes irlandeses y siendo el pequeño de trece hermanos. Sus raíces harían que varias de sus cintas cinematográficas tratasen la situación de Irlanda, aunque perdiese su apellido real (Feeney).
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Su biografía. Fuente. |
Si la película biográfica sigue, conocemos a Ford como aquel hombre que hacía películas del oeste (tal y como se definía), gracias a La diligencia, Fort Apache, El hombre que mató a Liberty Valance, Centauros del desierto… Pero también hizo películas de otros géneros: desde comedia (reír le apasionaba) con Río Arriba hasta drama con Tragedia submarina, Carne de cañón o Peregrinos, pasando por el género negro en títulos como Carne o filmes históricos como María Estuardo o El joven Lincoln. Por ellas, ganaría sus Oscars (y no por sus westerns): El delator (1935), Las uvas de la ira (1940), Qué verde era mi valle (1941) y El hombre tranquilo (1952). Pequeñas grandes historias, muchas veces, tratando la derrota o la vida cotidiana como algo trágico y hermoso.
La carrera de Ford va pareja con los inicios de la historia del cine. No solo dirigió películas mudas y luego sonoras, o fue testigo de la transición a formatos como el cine en blanco y negro a color (con éxito, a diferencia de otros realizadores). No solo hizo documentales sobre la Gran Guerra (él participó en ella, ayudó por los republicanos en la Guerra Civil Española…), Ford también fue actor (e incluso especialista). Como curiosidad, uno de sus papeles fue como miembro del Ku Klux Klan en El nacimiento de una nación de D.W. Griffith; Ford bromearía sobre el tema diciendo que entre las gafas y tener que sujetarse el capirote no veía nada.
Genio y figura, respetado por Orson Welles (quien respondió a qué director estadounidense le atraía más con: “Los viejos maestros. Quiero decir: John Ford, John Ford y John Ford”), Ford nos dejaría en 1973, a la edad de 79 años. Sin embargo, su legado ha continuado hasta hoy y se puede apreciar en el cine, un medio que ayudó a evolucionar desde su nacimiento e hizo digno de ser parte del mito, así que… fundido en negro y continuará.
No sabía gran cosa sobre su vida, el cine es una de mis asignaturas pendientes, poco a poco lo voy paliando, pero... es un mundo fascinante. Gracias por esta panorámica de John Ford :)
ResponderEliminarSin duda, John Ford tiene una vida digna de una película.
EliminarMe alegro de que te haya gustado.
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