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Toda la clase estaba atenta al compañero, que iba a comenzar su exposición. El profesor le dio paso y el alumno comenzó:
—Buenos y amables días a todos, compañeros míos, ya que me alegro muchísimo de veros aquí esta mañana lluviosa de diciembre. Ha llegado la hora de que os muestre mi trabajo, mi investigación, sobre los preceptos de las órdenes medievales de Inglaterra e Irlanda, espero no hacer que se os pase una hora demasiado tediosa, por tanto, iré al grano, debido a que pretendo que dure lo menos posible. Os he de decir que ha sido un trabajo arduo en cuanto a la realización y el tiempo, demasiado aplicado a tales vicisitudes e imprevistos de la época que nos ha tocado vivir...
Dos horas después, todo el mundo aplaudía, incluso al profesor que se le caían las lágrimas de orgullo. Sólo había alguien que se resistía, el único que se había mantenido atento toda aquella larga exposición, aunque tuvo que golpearse para no dejarse dormir.
La chica que se sentaba a su lado le dijo, confusa:
—¿Por qué no aplaudes?
—Eh… Básicamente, porque ¿no ha dicho nada? Sólo ha usado frases subordinadas, palabras olvidadas y relleno… Ha inflado lo que tenía y le ha quedado algo… extraño.
La chica se quedó pensativa, mientras los aplausos inundaban la sala y el alumno que había expuesto saludaba a su público como un actor de teatro, porque quizás era eso. La joven terminó diciendo:
—Lo que te pasa es que estás celoso.
Su compañero sólo respondió:
—Será.
Y el chico aplaudió... En honor de la exposición más vacía que había visto en su vida.
—Buenos y amables días a todos, compañeros míos, ya que me alegro muchísimo de veros aquí esta mañana lluviosa de diciembre. Ha llegado la hora de que os muestre mi trabajo, mi investigación, sobre los preceptos de las órdenes medievales de Inglaterra e Irlanda, espero no hacer que se os pase una hora demasiado tediosa, por tanto, iré al grano, debido a que pretendo que dure lo menos posible. Os he de decir que ha sido un trabajo arduo en cuanto a la realización y el tiempo, demasiado aplicado a tales vicisitudes e imprevistos de la época que nos ha tocado vivir...
Dos horas después, todo el mundo aplaudía, incluso al profesor que se le caían las lágrimas de orgullo. Sólo había alguien que se resistía, el único que se había mantenido atento toda aquella larga exposición, aunque tuvo que golpearse para no dejarse dormir.
La chica que se sentaba a su lado le dijo, confusa:
—¿Por qué no aplaudes?
—Eh… Básicamente, porque ¿no ha dicho nada? Sólo ha usado frases subordinadas, palabras olvidadas y relleno… Ha inflado lo que tenía y le ha quedado algo… extraño.
La chica se quedó pensativa, mientras los aplausos inundaban la sala y el alumno que había expuesto saludaba a su público como un actor de teatro, porque quizás era eso. La joven terminó diciendo:
—Lo que te pasa es que estás celoso.
Su compañero sólo respondió:
—Será.
Y el chico aplaudió... En honor de la exposición más vacía que había visto en su vida.
Esto tiene algo que ver con las exposiciones de clase? XD
ResponderEliminarMe ha hecho gracia
Eso me pasa a mi mucho. La mayoría de las exposiciones de clase no tiene nada de alma, nada de interés porque ni los que las realizan lo tienen. Vamos, en tu carrera supongo que habrá temas más interesantes, pero de Lingüística, poca pasión puedes ponerle, a no ser que seas muy raro xD
ResponderEliminarEsto de comentar a las cuatro de la mañana no es bueno... además, he vuelto a tomar té, lo raro es que no esté escribiendo post de cuchillos.
Te iba a decir, si algún día quieres intercambiar textos o simplemente, alguien con quien proponer desafíos literarios, este es mi correo: wolfs_rain_90@hotmail.es
Hey!
ResponderEliminarMe ha gustado su relato, muchas veces suelen pasar cosas asi y la verdad es que porque se use vocabulario bonito no implica que una cosa este bien hecha... No se...
Ya veo que alguien te ha puesto un malo, será porque le ha molestado...xD Pero bueno allá él o ella...
A mi me gustó y me parece que tienes toda la razón!
Espero que estés bien y que todo te vaya bien! Hasta pronto! Kisses!!
Els.
Hola, Azufre =)
ResponderEliminarAunque Andrea y tú lo hayáis pensado, no, no tiene que ver con las exposiciones de clase. Sólo quería expresar una teoría que tengo desde hace tiempo: que hay gente que adorna tanto que parece que dice algo.
Muchas gracias por tu comentario y tu opinión =)
Saludos, Misery.
ResponderEliminarA lo que le dije a Azufre, sumo que hay exposiciones para todos. He visto a gente muy buena y gente regular, aunque siempre depende del interés que le pongan en definitiva. Yo creo que si tomas té antes de una, serían muy animadas =)
En cuanto a pasarnos relatos y desafiarnos, ya sabe que a partir de ahora tendrá otra vía por la que aguantarme.
Hola, Els!
ResponderEliminarOpino que tan fácil como decir cosas vacías es marcar un casillero y no decir nada en un comentario, más cuando hay gente que eso de "vive y deja vivir" lo deben haber pisoteado.
En definitiva, que sí, que muchísimas gracias por su comentario y por su opinión =)