American Gods: Head full of snow, ¿eres capaz de creer en los dioses?

Quiero que pienses en nieve... Fuente.

"Shadow, en el mejor de los casos, sufres de corta imaginación. Vamos a tener que arreglar eso"- Wednesday.

American Gods, ¡qué maravilla de serie! Es genial poder pasarte todo un capítulo con la boca abierta, mientras escena tras escena se suceden hechos que te dejan sorprendido, a la vez que piensas en lo afortunado que eres por tener tu dosis de ficción de calidad cada semana. Ver American Gods es como ver un sueño despierto, uno donde todo es posible, desde lo exagerado hasta lo antiguo, desde lo mítico a lo real.

Head full of snow, el tercer capítulo de esta primera temporada, se ha convertido en mi favorito hasta la fecha. Me he pasado todos estos días hablando de él y pensando en cómo Gaiman y compañía lo han logrado. No solo mantiene los aciertos de los otos episodios en cuanto a fotografía, música, guion..., sino que añade varios instantes fascinantes, desde ese arranque con la Muerte y las tradiciones egipcias con un poder visual magistral. La humanización de la Muerte es una de las cualidades de Gaiman y aquí lo volvemos a ver con esa mezcla de fantasía, patetismo y vida. 

A continuación, tenemos el encuentro con Shadow y la hermana ausente; todo ello bajo esa atmósfera de sueño donde la joven vigila que un monstruo no escape de las estrellas y, tras un beso, le regala al protagonista la luna. Qué mágico, ¿no? Suena como una serie de hechos increíbles, pero verlos resultan aún más gratos, más embriagadores. Y es ese hecho el que resuelve la tensa trama con Czernobog hasta cierto punto: ¿quieres matarme? Acaba conmigo, pero antes apostemos una vez más. Esta aventura conecta con los mitos clásicos donde el héroe debe engañar al dios o el monstruo (si es que ambos términos no se convierten en sinónimos).

El episodio continúa con el carisma de Wednesday, esa lluvia nocturna, esos augurios en los que concentra toda su suerte. Su carisma es estupendo y la idea de la nieve me ha parecido fantástica, dotando de poesía a toda la puesta en escena y que es acompañado por el cliffhanger de la mujer muerta, la suerte y el destino de los personajes. ¿Robar un banco? Puede ser fácil. ¿Crees? Ahí siempre está la dificultad.

En cuanto a la "polémica" escena del taxista y el vendedor... Imagino que este mundo está muy mal cuando busca polémicas con temas como dos hombres teniendo sexo y la magia de los mitos antiguos resucitados por Gaiman. Por tanto, la fantasía es aún más que necesaria. Creo que es un pequeño cuento dentro de esta gran historia que considero fascinante por su desenlace y lo que nos narra: cómo una vida cambia cuando es tocada por un dios.

En definitiva, si aún no estás viendo American Gods, ¿a qué estás esperando a ver una de las mejores series de la temporada?