Crítica de la película: Wonder Woman, la búsqueda de la maravilla

Wonder Woman, la nueva película del DC Extended Universe. Fuente.

Después de una larga espera, quizás demasiado larga (ay, los spoilers, ay, no saber entender a un personaje), Wonder Woman ha llegado a la gran pantalla como la primera superheroína que no sufre los achaques de propuestas nefastas como Catwoman o Elektra. Por suerte, estamos ante una buena película, la mejor del Universo DC en el cine desde 2008 y la mejor película de superhéroes con una protagonista femenina (aunque no abundan, por desgracia).

Uno se alegra de que, por fin, el DC Extended Universe tenga una obra cinematográfica que la salva de la constante humillación y las palizas constantes que sufre por parte de los críticos y algunos seguidores del género, además de los consabidos haters. Yo mismo he sido muy crítico con algunas de sus últimas producciones. Man of Steel fue una película correcta, Batman V Superman poseía numerosos fallos provenientes de una visión viciada por esa deconstrucción malentendida y el Escuadrón Suicida era un desastre entretenido.

Trayendo la maravilla

Wonder Woman aprovecha la estructura de un flashback para relatarnos los orígenes de Diana, la amazona, y su descubrimiento del mundo de los hombres a través del perdido espía Steve Trevor, que le hablará de la Gran Guerra, donde quizás espera un monstruo tan temible como el dios Ares, asesino de todos los dioses.

La película debe lidiar con todo lo mitológico, el choque entre un mundo y otro (las amazonas y la Europa en guerra) y aportar los temas bélicos y las peleas típicas de este "género" que son los superhéroes en la gran pantalla. El espectador habitual ya ha visto estos elementos en filmes como Thor o El Capitán América, aunque uno siente que el espejo de esta Wonder Woman es el Superman de Richard Donner, el film que nos hizo creer que un hombre podía volar.

A diferencia de otras propuestas del DC Extended Universe, este film es más optimista pese a tratar de la guerra. Hay humor (muy dosificado), pero también están esos momentos de calma entre los personajes donde sentimos que no tienen que estar llorando por las esquinas o pidiendo el número de teléfono de la línea de la esperanza para no suicidarse. El tono, todavía grave, de los dioses superhéroes del panteón DC está ahí, pero funciona mejor, sin duda, que las otras propuestas al evitar fallos garrafales, montajes extraños y decisiones poco acertadas. 

Esperando todo de Diana

Las exigencias con Wonder Woman, al ser el personaje que es y ser la primera superheroína moderna en el cine, han sido muy altas y se le han pedido muchas cosas, como una defensa del feminismo. Uno no suele esperar tantísimo de una película de superhéroes como lo aguarda de Wonder Woman, donde múltiples debates entran en una tertulia sinfín. Lo interesante es que, por suerte, Wonder Woman cumple y es un film digno, aun con algunos ligeros contratiempos.

La directora encargada de llevar al personaje a la gran pantalla es Patty Jenkins, un nombre que no es ajeno a los cómics, porque estuvo a punto de dirigir Thor. El Mundo Oscuro. Ahora, con Wonder Woman, es la directora que ha logrado la mayor taquilla con un film protagonizado por una mujer de la historia y es un motivo para sentirse orgulloso. Esta artista cumple apoyada en una solvente fotografía que juega con tonos azulados y cálidos, además de permitir unas escenas de acción que se pueden ver sin perderse (incluso cuando los efectos especiales resultan que caen en el valle inquietante).

Hay escenas muy bien dirigidas, con más carisma que la mayoría del cine de superhéroes. Un ejemplo claro está esa tierra de nadie donde Wonder Woman demostrará de qué está hecha y donde la acompañamos desplegando todos sus poderes. Incluso puede que sea mejor que el clímax, que tampoco está nada mal cuando descubrimos al auténtico Ares y los sacrificios deben consumarse.

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Un acierto para DC

Sobre el guion de Alan Heinberg abarca mucho y logra gratamente ser lo que debe ser, incluso cuando cae en los puntos comunes del género de superhéroes. Muchos aspectos se notan ya tocados, pero personajes como Diana y Trevor sacan adelante la cinta porque los actores tienen el carisma que quizás le falten a algunas escenas. El film, incluso, tiene algunos giros de guion interesantes para aquellos que no conocen los cómics de Diana, como la revelación de quién es Ares o cuál es su plan (aunque el dios de la guerra -o de la verdad- use técnicas que ya utilizó el general Zod).

Lo importante es que siento que es una de las primeras películas del Universo DC que tiene alma. Los sacrificios de Superman, los personajes del Escuadrón Suicida, los tormentos de Batman no llegan a conmover tanto como esa Wonder Woman que decide salvar el mundo, debe afrontar derrotas y ser acompañada por seres rotos.

Hay voces que comentan que Steve Trevor tiene mucho protagonismo y yo, personalmente, creo que ejerce el necesario papel de guía del film, además de interés amoroso de Diana. Y funciona mejor que otros personajes del cine de superhéroes que tienen estos dos roles. Es un personaje interesante, quizás no fascinante, pero Chris Pine lo interpreta bien y no creo que eclipse a la auténtica protagonista, que es Diana.

Una de las espectaculares escenas de acción. Fuente.

Wonder Woman representa esperanza. No es solo una amazona, una guerrera sin piedad, sino que es bondad. Ella cree en la paz y piensa que puede llegar a haberla. Su visión del mundo es inocente, más hastiada a medida que el tiempo pasa, como demuestra el prólogo y epílogo de este film, pero siempre creemos que hay algo en ella, algo que aporta un poco de luz, por eso es un gran personaje. En Batman V. Superman, Wonder Woman nos decía que ya se había enfrentado a monstruos de otros mundos antes y su propia película, un inmenso flashback de más de dos horas, es la respuesta a ese comentario.

La actriz Gal Godot lo hace muy bien como esta versión de Wonder Woman y representa un rol con cierto carisma que nos hace augurar esperanza para la futura Liga de la Justicia, dirigida por Zack Snyder y Joss Whedon. No obstante, su Diana estaba entre lo mejor de Batman V. Superman y aquí nos ofrece más y, por lo tanto, mejor en cuanto a un personaje que bien puede ser el alma de este DC Extended Universe que se siente que, por fin, arranca incluso con una cortinilla acorde.

Hablando del resto del reparto, los secundarios, tanto las amazonas como los compañeros de la batalla, cumplen con sus pequeñas partes en una película que se siente enorme, pero que no resulta tan pesada como otras propuestas similares.

En cuanto a los villanos, Lundendorff y la Dr. Maru, encarnados por Danny Huston (una mezcla de su militar de Lobezno Inmortal y Cráneo Rojo) y Elena Anaya, están correctos, aunque sus partes quizás sean las más endebles o las más unidas al cruel estereotipo o al pulp del que proceden (ya digo que no es extraño que nos recuerde al Capitán América, porque Wonder Woman y él son personajes surgidos de una misma época).

Un punto y aparte para David Thewlis que le toca encarnar (cuidado con el spoiler) al malo malísimo de la función, que no es otro que Ares. Quizás el film necesitaba haber construido mejor al personaje para sorprendernos realmente. Al menos, dispone de unos monólogos sacados de los cómics muy interesantes y la recreación estética del Ares de los tebeos está muy conseguida.

Wonder Woman, ¿un film del que esperábamos demasiado? Fuente.

¿Está ella con nosotros?

Pese a ello, la película puede llegar a parecer lenta en algunos momentos y algunos instantes suenan a ya vistos, como comentaba. El problema de que Wonder Woman se haya estrenado en 2017 es que quizás podría haber resultado más fresca en 2011 o antes, cuando Marvel comenzó a repartir su universo cinematográfico. Sin embargo, los temas de la cinta como la guerra, el papel de la mujer y el destino de los inocentes siguen vigentes en nuestra sociedad, aunque ya tocados por el "género".

Los efectos especiales de Wonder Woman resultan exultantes. Los cuadros entre renacentistas y barrocos con los que se cuenta la leyenda están muy bien y son una muestra de esa búsqueda de lo "bello" que puede llegar a sacar del film. Sí, Isla Paraíso es hermosa, sí, Londres está fantásticamente recreada..., pero hay otros momentos donde se siente algún aspecto irreal (pero no mucho más que en otros films similares).

En cuanto al apartado musical, Rupert Gregson-Williams recupera el tema Is she with you? de Batman V. Superman, creado por Hans Zimmer y Junkie XL para nuestra amazona favorita. Gregson-Williams lo rescata una y otra vez hasta convertirlo en un leitmotiv de nuestra Diana.

En definitiva, Wonder Woman siempre ha significado esperanza en los cómics. Ahora, significa esperanza en la gran pantalla y para todos los superhéroes. Eso es, sin duda, una maravilla. La merecemos y creemos en ella.