Ser un niño y no poder dormir a menos que escuches música cuando eres pequeño, puede llegar a ser un problema. Para mí no lo fue, aunque forjó a hierro candente una canción en mi memoria que no es otra que la que traigo hoy para "El tema del día", "Smells like Teen Spirits" del grupo grunge "Nirvana", siendo una de las canciones más importantes del género y situándose en la lista de "Las 500 mejores canciones de la Historia" realizada por la revista "Rolling Stones" (ocupando el puesto noveno). Motivos para que se me quedase grabada no faltan.
¿De qué va la canción? Desde una crítica a la mentalidad acomodada hasta a la falta de movimiento, de lucha, de la Generación X (de la cual se ha convertido en himno) pasando por la rebeldía adolescente. Kurt Cobain, vocalista del grupo (y cuya temprana muerte le convirtió en una leyenda), dijo en alguna ocasión que sus canciones no tenían un significado propio, que eran trozos de poesía adornados con "la basura que le gustaba" y luego la gente no sabía por qué le buscaba significado.
Curioso, si algo me parece esta canción es una lucha en la decadencia. No sé si bien fue por la canción, su letra o el vídeo, pero el ambiente sórdido, grunge, para mí habla de la decadencia. Quizás Kurt tuviese razón y estoy viendo formas en las nubes que no existen.
Sobre el origen de la canción, escrita por los miembros del grupo, cabe destacar que su título viene de un graffiti de la cantante punk y amiga de Cobain: Kathleen Hanna que decía: "Kurt smells like Teen Spirit" (Kurt huele a espíritu adolescente). A Cobain le gustó el título. Más tarde, descubrió que Teen Spirit era una marca de desororante y lo que pretendía decir Kathleen Hanna es que "olía a chica". Cosa que no le vino mal a la compañía cosmetica a la que pertenecía la marca de desorante, que rápidamente sacó el slogan: "Do you smell like teen spirit?" (¿Hueles a teen spirit- espíritu adolescente-?".
Me gusta la canción. No sé si habla mi espíritu crítico, la nostalgia o la parte flipada de niño que tengo aún pululando por mis entrañas. Recuerdo ver aquel vídeo en la televisión o escuchar la canción en la radio y a Cobain convertido en un extraño ídolo en la decadencia.
No me importa a qué huela, me gusta. A continuación, el videoclip. Disfrutadlo.
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